El Tesoro Público ha colocado 4.813,24 millones de euros en una emisión de bonos y obligaciones, cerca del rango máximo previsto, aunque ha ofrecido a los inversores tipos más altos que en la anterior ocasión en los bonos a diez y tres años, y ha bajado la rentabilidad en el de cinco años.
Los inversores siguen mostrando apetito por la deuda pública española, ya que el importe solicitado ha superado los 10.700 millones de euros, 2,2 veces por encima de lo que el Tesoro ha colocado finalmente en los mercados.
En concreto, el organismo ha vendido 1.835,18 millones en bonos a 3 años con cupón del 0,25% y vencimiento a 30 de abril de 2018, con un tipo marginal del 0,412%, frente al 0,348% de la emisión previa. La demanda ha superado en 1,9 veces lo adjudicado, muy por debajo de la ocasión anterior cuando la superó en 4,9 veces.
En la subasta a cinco años, el Tesoro ha vendido 1.415,44 millones de euros y, en este caso, el tipo de interés marginal ofrecido ha bajado al 1,028% desde el 1,070% de la subasta anterior. Las peticiones de los inversores también han superado lo finalmente colocado (2,4 veces frente a las 2,2 veces de la emisión anterior).
Por último, el organismo ha emitido 1.562,62 millones en obligaciones a 10 años con cupón del 2,15% y vencimiento a 31 de octubre de 2025, y el interés marginal se ha elevado al 2,156%, ligeramente por encima del 2,146% que se ofreció a los inversores en la emisión previa. La demanda ha superado en 2,5 veces lo vendido en los mercados, frente a las 1,8 veces de la ocasión anterior.
Tras la subasta de este jueves, el Tesoro no volverá a los mercados hasta el próximo martes, 22 de septiembre, con una nueva subasta de letras, con la que cerrará las emisiones del mes de septiembre, que volverá a reanudar en octubre.