La tasa anual de inflación en la eurozona aumentó una décima en noviembre, hasta el 2,2%, según la estimación preliminar publicada este martes por la oficina de estadística comunitaria Eurostat.
Sin embargo, la inflación subyacente, que excluye el efecto de los componentes más volátiles - energía, alimentos frescos, tabaco y alcohol - y es la principal referencia para el Banco Central Europeo, se mantuvo en el 2,4% por tercer mes consecutivo.