El presidente del Eurogrupo y primer ministro de Luxemburgo, Jean Claude Juncker, ha amenazado a Atenas con el fin de las ayudas de la Unión Europea y no descarta ya que Grecia se vea abocada a la quiebra.
Si Grecia no aplica las necesarias reformas no podrá esperar que se produzcan "las aportaciones solidarias de los demás", afirma Juncker en declaraciones adelantadas hoy por el semanario Der Spiegel, en las que, pata tal caso, augura su bancarrota en un plazo de dos meses.
"En el caso de que lleguemos a la conclusión de que todo sale mal en Grecia, no habrá un nuevo programa (de ayudas), lo que significa que en marzo se producirá la declaración de quiebra", afirma Juncker en la revista.
Agrega que la sola posibilidad de que algo así pueda suceder debería "dar a los griegos músculos cuando en estos momentos no hacen sino mostrar síntomas de parálisis" y lamenta el retraso en el proceso de privatizaciones de empresas públicas.
"Grecia debería saber que no vamos a cejar en el tema de las privatizaciones", advierte el primer ministro luxemburgués, quien subraya como elemento perjudicial para la imagen del país la "existencia de elementos corruptos en todos los niveles de la administración".
Juncker destaca finalmente que antes de que se tome decisión alguna sobre un nuevo programa de ayudas, los acreedores privados deberán haber hecho su aportación al rescate de Grecia y se deberá hablar con las autoridades de Atenas sobre medidas de ahorro adicionales.