El Ibex 35 ha cedido un tímido 0,27% y ha terminado en 9.630 puntos en la última jornada de julio, marcada por el anuncio del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de elecciones generales anticipadas y por la amenaza de Moody's de rebajar la calificación al reino de España. El selectivo madrileño despide el mes con un descenso del 6,9% y la prima de riesgo española en 354 puntos básicos.
La amenaza de Moody's sobre la solvencia de España y los problemas de EEUU para evitar la suspensión de pagos hicieron que la prima de riesgo española escalara hoy hasta los 354,3 puntos básicos, su segundo nivel más alto al cierre de una sesión desde que se creó el euro.
La ampliación de la prima de riesgo, que es el interés de más que exigen los inversores por comprar bonos españoles en vez de alemanes, se debió a la compra masiva de títulos germanos, que son los que actúan como activo refugio en situaciones de crisis. De hecho, el rendimiento de la deuda alemana a 10 años bajó hasta el 2,538 por ciento, frente al 2,633 por ciento del jueves, mientras que la rentabilidad de la deuda española con vencimiento en 2021 avanzó hasta el 6,081 por ciento, desde el 6,034 por ciento de ayer.
NERVIOSISMO EN LA BOLSA POR LA SITUACIÓN DE ESTADOS UNIDOS
Por su parte, el selectivo madrileño despide el mes con un descenso del 7%, lo que significa la mayor caida mensual registrada desde noviembre de 2010, cuando se dejó un 14,29%, y estrenará agosto con la prima de riesgo por encima de los 300 puntos básicos y el posible 'default' de Estados Unidos.
El nerviosismo se ha instalado en los mercados ante la incapacidad de demócratas y republicanos de alcanzar un acuerdo sobre el techo del déficit, así como de los líderes europeos de resolver la crisis de deuda soberana de Grecia, pese al acuerdo sellado por el Eurogrupo. Así quedó patente el pasado 11 de julio, cuando el diferencial de la deuda española respecto al bono alemán a diez años tocó su máximo histórico en 380 puntos básicos.
El Ibex no se ha inmutado ante el anuncio de elecciones el próximo 20 de noviembre, aunque desde la firma Dracon Partners consideran que la noticia supone "un plus de nerviosismo e inestabilidad a corto plazo en el mercado". Esta casa de análisis considera que "si las cosas se hacen bien cabe esperar para final de año una situación política más estable y un Gobierno con una posición más fuerte para seguir avanzando en las medidas que España necesita", sobre todo la del mercado laboral.
"BUENA NOTICIA" PARA BBVA
En el mismo sentido se ha pronunciado el presidente del BBVA, Francisco González, para quien un adelanto electoral es "una buena noticia" y España requiere un Gobierno fuerte para situarse a la altura de los países más importantes de Europa.
Las pruebas de estrés a la banca y la aprobación del segundo rescate de Grecia en julio no han disipado las dudas de los inversores sobre la capacidad de algunos países europeos de afrontar sus pagos, lo que ha mantenido la prima de riesgo de España por encima de 300 puntos básicos y ha castigado especialmente a la banca. En el cómputo mensual, el banco de la Caixa es el que más posiciones ha perdido (-15,8%), junto a Abertis (-15,4%) y Ebro Puleva (-14,2%). BBVA se ha dejado un 7,3% en julio, seguido de Sabadell (-6,8%) y Santander (-5,8%), mientras que Bankinter y Popular han cedido un 5,3% y un 4,2%, respectivamente.
A escala nacional, el panorama bursátil ha venido marcado por el salto al parqué de los nuevos bancos creados por grupos de cajas de ahorros, primero Caixabank, y posteriormente Bankia y Banca Cívica, que lograron saldar en tablas su día de estreno en el parqué.