El principal indicador de la bolsa española, el IBEX 35, ha perdido un 1,48% y los 9.200 puntos, su nivel de cierre más bajo desde septiembre de 2013 lastrado, al igual que otros mercados, por el ensayo nuclear de Corea del Norte y algunos indicadores negativos en China y Estados Unidos.
Con la prima de riesgo sin apenas cambios en 116 puntos básicos, el IBEX se ha dejado 137,80 puntos en la sesión hasta alcanzar 9.197,40 unidades, aunque en algún momento ha visto peligrar los 9.100. Aún peor ha sido la sesión en Milán, donde el MIB se dejaba un 2,67%; el FTSE de Londres retrocedía un 1,04%, el CAC de París, un 1,26%, y el DAX alemán, un 0,93%.
Todos los grandes valores han cerrado con pérdidas, del 3,22% para Santander, del 2,86% para Repsol, del 2,14% para BBVA, del 0,72% para Telefónica, del 0,64% para Inditex, y del 0,49% para Iberdrola, aunque el mayor descenso, superior al 6%, ha sido para ArcelorMittal. Únicamente dos de las cotizadas del IBEX, Endesa y Amadeus, han cerrado con ganancias, del 0,64 % y del 0,25%, respectivamente.
En el mercado abierto destacaba el repunte de Natra, del 70,97%, el día en el que comenzaba el periodo de suscripción preferente de una emisión de obligaciones convertibles en acciones por importe nominal máximo de 53,2 millones, que ha lanzado para reestructurar su deuda.
Los inversores se despertaban con un seísmo de algo menos de 5 grados de magnitud en la escala de Richter que afectaba a la región nororiental de Corea del Norte, presuntamente causado por el cuarto ensayo nuclear del régimen norcoreano después de los realizados en 2006, 2009 y 2013.
El Consejo de Seguridad de la ONU no ha tardado en convocar una reunión de urgencia para abordar el asunto, que desestabilizaba completamente las bolsas de todo el mundo.
Además de las tensiones geopolíticas, en la sesión, festiva por la Epifanía, los inversores han conocido algunos datos macroeconómicos como el del sector servicios de España, que aunque se ralentizó en diciembre, su actividad siguió creciendo con solidez en el último mes de 2015, según Markit.
Pero a media jornada el departamento de Comercio de Estados Unidos daba el golpe de gracia a una jornada negra con la publicación del déficit comercial de Estados Unidos, que se redujo un 5 % en noviembre con caídas tanto en las exportaciones como en las importaciones, indicador de que el país no ha dejado completamente atrás la crisis.
Tampoco ayudaba un dato peor de lo esperado sobre el sector servicios en China, que empeoró en diciembre respecto al mes anterior debido a la débil demanda, lo que ocasionaba cuantiosas pérdidas en la apertura de Wall Street.
Y menos aún un nuevo descenso en los precios del petróleo, tanto del WTI de Tejas como del de referencia en Europa, el Brent, que cotizaba por debajo de 35 dólares por primera vez desde 2004.