El Gobierno ha recaudado 1.200 millones con la regulación fiscal que aprobó en marzo pero que entró en vigor en junio y cuyo plazo ha terminado hoy, lo que supone el 48 por ciento de los 2.500 millones que había previsto.
El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha informado en Mijas (Málaga), durante el Foro Hacienda, Administraciones y la salida de la crisis, organizado por el Diario Sur, de que la recaudación "provisional, aunque ya cerrada", significa un afloramiento de bases de 12.000 millones de euros.
Montoro ha declarado que "ha valido la pena hacer -la regulación- en un momento como el que vive España".
La amnistía fiscal parcial ha permitido la regulación de activos pagando un interés único del 10 por ciento.
Montoro ha recalcado que esta regulación fiscal permite recaudar para financiar los servicios públicos y alcanzar así los objetivos marcados por el Gobierno.
El titular de Hacienda ha aseverado que la balanza de pagos de España este año permite abrir "una puerta de esperanza", ya que en el tercer trimestre tenía un superávit de algo más de dos puntos porcentuales.
"El cambio de la balanza de pagos ya es real", ha destacado el ministro de Hacienda, quien ha asegurado que el turismo es una fuente fundamental y básica para que España pueda salir de la crisis.
Ha insistido en que a España lo que le conviene es reducir el déficit público y ha recalcado que no es una política impuesta por Europa, sino que lo que "le conviene".
Así ha indicado que hay que reducir el déficit a "un ritmo compatible" con no provocar más recesión económica, lo que ha calificado como "la única vía" para un país "como España", aunque sea adoptar medidas "dolorosas" en términos sociales.
Por último, ha puntualizado que el Gobierno no tiene intención de subir el IVA turístico, y ha recalcado que se incrementó cuando la prima de riesgo se situó en los 700 puntos básicos y que esa decisión "ya está sacando al país de la crisis, gracias a su aportación del turismo al equilibrio de la balanza de pagos".
DATOS
Un total de 31.484 ciudadanos se han acogido a la amnistía fiscal que finalizó el pasado viernes, según los datos provisionales que maneja el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.
Así, el importe medio de las declaraciones asciende a 37.830 euros por contribuyente, aunque el balance es provisional y se ha realizado a partir de las declaraciones presentadas y no de las cuantías ingresadas.
El grueso de las declaraciones, según Hacienda, se concentró al final del periodo de vigencia de la amnistía fiscal. Así, sólo en el mes de noviembre se presentaron 29.242 declaraciones, casi el 93% del total.
Las declaraciones registradas en el noveno mes del año aportaron un total de 1.050 millones a las arcas del Estado, más del 88% de lo recaudado por esta medida, que ha estado en vigor ocho meses.
Con todo, el volumen de activos y rentas afloradas está cerca de los 12.000 millones, lo que permitirá, según Hacienda, que un "importante volumen de activos y bienes" que han estado ocultos durante años pasen a tributar en próximos ejercicios.
Así, la amnistía, tal y como afirma el Ministerio, servirá para generar ingresos tributarios de una forma continuada en el futuro y supondrá una inyección de liquidez en la economía española.
Además, el departamento dirigido por Cristóbal Montoro recuerda que la amnistía iba acompañada de la ley de lucha contra el fraude "más ambiciosa" de las últimas décadas, con medidas como la obligación de informar sobre la existencia de bienes y derechos situados en el extranjero.
LA LUCHA CONTRA EL FRAUDE
En este sentido, asegura que la Agencia Tributaria ha ingresado 9.246 millones de euros por la lucha contra el fraude fiscal en los diez primeros meses del año, lo que supone 1.300 millones más (+17%) que en el mismo periodo del año anterior.
Según Hacienda, en la medida en que se disponga de información más detallada sobre el volumen de bienes y derechos aflorados, se podrá ofrecer un balance más completo tanto de los capitales como de los ingresos que ha generado la amnistía.