El Gobierno ha limitado la tributación en el IRPF de las indemnizaciones por despido y ha establecido un mínimo exento equivalente a 2.000 euros por año trabajado. Así lo establece la nueva reforma fiscal que hoy ha especificado el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, que ha añadido que de esta forma se introduce "equidad" en el tratamiento fiscal de las indemnizaciones por despido improcedente.