La Reserva Federal (Fed) de EEUU investiga la vulnerabilidad de las filiales estadounidenses de los grandes bancos europeos a raíz de la crisis de deuda en la zona euro, según publica hoy el diario The Wall Street Journal.
Según fuentes anónimas cercanas al banco central estadounidense, la Reserva Federal de Nueva York -que supervisa las operaciones en EEUU de gran parte de los principales bancos de Europa-, ha mantenido recientemente "extensas reuniones con esas entidades para sopesar su vulnerabilidad a una escalada de las presiones financieras".
La Fed ha requerido más información de las entidades financieras europeas para saber si tienen un "acceso fiable" a los fondos necesarios para operar en el día a día en EEUU, siempre según las fuentes citadas por el rotativo neoyorquino.
Las autoridades de la Fed de Nueva York están "muy preocupadas" por que los bancos europeos se tengan que enfrentar a dificultades de financiación en EEUU, según aseguró a ese medio un alto ejecutivo de una de las entidades europeas que ha participado en las reuniones con el banco central.
El diario asegura que la Fed ha estado en contacto con el superintendente de servicios financieros en Nueva York, Benjamin Lawsky, para supervisar las posiciones de financiación de los bancos extranjeros, y Lawsky ha recibido información casi diariamente sobre la situación de las entidades europeas.
Con esta intensificación del escrutinio sobre los bancos europeos, las autoridades estadounidenses tratarían de evitar que se repita la crisis financiera de 2008, asegura el diario, que especifica que en esta ocasión el miedo es que la crisis de deuda en la zona euro dificulte la capacidad de esas entidades de financiar préstamos y cumplir con sus obligaciones financieras en EEUU.
El rotativo, que asegura que los problemas actuales no se acercan todavía a la gravedad de la pasada crisis, recuerda que algunos de los grandes bancos europeos, como el francés Société Générale, el alemán Deutsche Bank o el italiano UniCredit, tienen importantes operaciones en EEUU y dependen principalmente de fondos prestados para financiarlas.