Una persona disfrazada de euro se pasea frente a la sede del Banco Central alemán | EUROPA PRESS
(Actualizado

Veinte años ha tardo el dólar en dar alcance al euro otra vez. Un euro y un dólar valen hoy casi lo mismo o, para ser exactos, un euro este miércoles vale un poco menos que un dólar.

El euro cayó este miércoles por debajo de un dólar pero recuperó posiciones rápidamente por la mejora del ánimo en los mercados pese a la elevada inflación en EEUU (9,1%).

El euro se cambiaba hacia las 15.00 horas GMT a 1,0066 dólares, frente a los 1,0062 dólares en las últimas horas de la negociación europea del mercado de divisas de la jornada anterior.

Desde hace meses las subidas agresivas y rápidas de los tipos de interés en EEUU fortalecen al dólar y debilitan al euro, cuya caída se ha acelerado las últimas semanas.

La moneda única se cambió en una banda de fluctuación entre 0,9996 y 1,0102 dólares.

Situación poco optimista

Atrás quedan los tiempos en que había que pagar más de un dólar y medio para hacerse con un solo euro. Eso ocurría en 2008. Pero es que se venía de una situación aún menos optimista que la actual. Incluso por debajo de la paridad actual.

El euro y el dólar alcanzan la paridad por primera vez en veinte años

En 2002, por poco menos de 90 centavos de dólar se podía comprar un euro. Ahora lo que queda por ver es si se mantendrá una igualdad entre las divisas, con pequeñas fluctuaciones, o el euro comenzará a perder fuerza frente a la moneda estadounidense.

¿Pero en qué beneficia o perjudica a la eurozona una moneda única débil o fuerte?. Pues directamente las importaciones nos resultan más caras y este aumento de precios no le hace ningún favor a la elevada inflación europea. Por otro lado, se hace más atractiva la deuda del Tesoro de EEUU con lo que puede haber también un vuelco de capitales hacia el otro lado del 'charco'.

Si planea vacaciones en EEUU olvídese de los felices años previos a la crisis de las hipotecas basura y el colapso de 2008, cuando la gente se iba con un tipo de cambio superior al 1,5.

La inflación de EEUU subió al 9,1% en junio, aumentando más de lo previsto

En el lado optimista...no hay lado optimista esta vez. Porque un euro barato haría más atractivas las exportaciones europeas, pero en la actual coyuntura con una guerra en el continente, una crisis energética, la elevación correspondiente de los precios de los suministros, la dificultad de encontrar materias primas y algunas cadenas de distribución interrumpidas, Europa no lo tiene nada fácil.

Baste un ejemplo, el petróleo se paga en dólares. Cada barril costará más a los europeos. Y además ahora, con el cierre del gas ruso muchas naciones europeas han pasado a depender en mayor medida del gas estadounidense. Un gas necesario y ahora más caro.