El Banco de España critica el nivel "injustificado" de la prima de riesgo

  • Dice que la economía española sigue sometida a una vigilancia "muy estricta" por parte de los mercados
  • España coloca 2.988 millones en letras y baja el interés de las de 6 meses

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, dijo hoy que la economía española todavía sigue sometida a una vigilancia "muy estricta" por parte de los mercados, "que continúan exigiendo un nivel injustificadamente elevado de las primas de riesgo soberana". El gobernador hizo esta consideración durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados, en la que hizo referencia a la situación de algunos países periféricos de la zona euro.

IRLANDA, PORTUGAL Y GRECIA

En este sentido, aseguró que más allá del necesario proceso de reforma del gobierno económico del euro, "es imprescindible encauzar la difícil situación por la que atraviesan Irlanda, Portugal y sobre todo, Grecia, donde la tensión es máxima y de cuyo desenlace pueden derivarse implicaciones muy transcendentes para el conjunto de la zona euro"."Cabe esperar que las decisiones de las autoridades europeas estén a la altura de los retos planteados", manifestó.

Además, añadió que en las últimas semanas, "hemos sido testigos del efecto que han causado las recientes discusiones en Europa sobre la posible participación del sector privado en la economía griega, a la vez que reaparecían las dudas sobre la seriedad del compromiso de España a afrontar las reformas pendientes"."El contagio de España de la crisis de deuda se ha debido en última instancia, a la presencia en España de algunos elementos de vulnerabilidad como consecuencia de los desequilibrios acumulados durante la fase previa de expansión, a los que se sumaron los que emergieron durante la crisis, como la alta tasa de paro y el elevado déficit público", explicó.

El gobernador recordó que hace un año ya se hizo eco en la misma Comisión de los acontecimientos que habían sacudido a la zona del euro en la primavera de 2010, con la aparición de la crisis de la deuda soberana, la respuesta de las autoridades mediante la aprobación del programa de asistencia financiera a Grecia y los primeros pasos para la reforma de los mecanismos de gobierno de la Unión Económica y Monetaria. "Los efectos de esa crisis sobre la economía española fueron muy serios, pero la política económica respondió con un ambicioso plan de ajuste fiscal, un nuevo impulso al proceso de saneamiento y reestructuración financiera, y la puesta en marcha de reformas estructurales en diversos ámbitos", dijo.

En este sentido, matizó que "en la grave coyuntura a la que entonces se enfrentó España", se escogió la orientación "adecuada" con lo que las iniciativas adoptadas permitieron atenuar los riesgos que se habían hecho presentes.

A pesar de ese positivo cambio de rumbo, "doce meses después, la situación sigue siendo compleja, tanto desde la perspectiva europea como desde el punto de vista interno de la economía española", advirtió Fernández Ordóñez, quien matizó que "no es exagerado" decir que ahora estamos "ante una encrucijada importante para el futuro de la Unión Económica y Monetaria y para el afianzamiento de la recuperación en España".

Por último, señaló que la crisis de deuda representa "el episodio más grave vivido en el área del euro desde la fundación de la moneda única", que ha puesto de manifiesto además de lagunas existentes en el entramado institucional del euro, la ausencia de mecanismos para poner freno a la acumulación de desequilibrios macroeconómicos y la falta de instrumentos con los que manejar situaciones de crisis como las ocurridas"."Sin embargo, también hay que reconocer que en esos tres ámbitos se han producido avances importantes en los últimos meses", concluyó.

ESPAÑA COLOCA 2.988 MILLONES EN LETRAS Y BAJA EL INTERÉS DE LAS DE 6 MESES

Este marttes, el Tesoro Público colocó 2.988 millones de euros en letras a tres y seis meses y consiguió bajar el interés marginal aplicado a éstas últimas, en una emisión en la que la demanda de las entidades ha sido de nuevo fortísima y ha superado los 15.000 millones de euros.

Así, se adjudicaron 2.356 millones de euros en letras a seis meses con un interés marginal del 1,789 %, inferior al 1,798 % aplicado en la anterior emisión de esta denominación. También se colocaron 632,10 millones de euros en letras a tres meses con un interés marginal del 1,578 %, por encima del 1,418 % anterior.

En la anterior subasta de letras a tres y seis meses, celebrada el 24 de mayo, la alta demanda de los inversores permitió a España colocar 2.300 millones de euros en letras a un menor coste y encadenar tres emisiones consecutivas con menores rendimientos.