La libertad de expresión ha centrado hoy los actos del Día Internacional de los Derechos Humanos, una jornada que Amnistía Internacional ha celebrado con un maratón de firmas en más de 50 ciudades españolas como Madrid, donde Joan Manuel Serrat ha recordado que miles de personas están silenciadas en todo el mundo.
"Yo, Joan Manuel Serrat, puedo expresar libremente mi opinión sin miedo a ser perseguido. He llegado hasta aquí sin que nadie me pregunte adónde me dirijo ni cuestione qué cosas voy a hacer o qué cosas voy a decir. Nadie me ha amenazado con represalias si critico al Gobierno. No me han advertido de que si hablo sobre determinado tema mi familia pueda sufrir hostigamiento. Puedo dar mi opinión sea cual sea mi identidad de género sin temor a que las autoridades de mi país me encarcelen, me torturen o me ejecuten. Cuando acabe este acto volveré a mi casa y retomaré mi vida diaria".
Sin embargo, ha recordado Serrat, "millones de personas en todo el mundo no pueden hacer lo mismo" porque para ellas la libertad de expresión "simplemente no existe".
Tras las palabras de Serrat, el director de Amnistía Internacional, Esteban Beltrán, ha recordado que la organización cumple su cincuenta aniversario y, por eso, ha querido celebrar este día con un maratón de firmas en 50 países de todo el mundo y en 50 municipios españoles.
Las firmas, ha precisado, serán enviadas a las autoridades sirias, turcas y de Corea del Norte, "tres lugares en los que es peligroso tener opiniones que no sean del agrado de sus gobernantes".
Según los datos de AI, en 2010 se produjeron ataques a la libertad de expresión en al menos 89 países porque, "paradójicamente, este es uno de los derechos que mayor retroceso ha sufrido en el último año, pese al auge de las redes sociales".
Ejemplo de ello son las represiones vividas en algunos países del norte de África donde ha tenido lugar la llamada "primavera árabe", en la que los gobiernos han intentado limitar los derechos de los ciudadanos con amenazas, detenciones, torturas y asesinatos.
Amnistía no ha sido la única organización que ha conmemorado este Día Internacional.
Cruz Roja Española lo ha celebrado con la lectura ininterrumpida de los treinta artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y con la exposición "La Humanidad en Guerra", formada por imágenes que muestran la realidad de los conflictos armados.
La lectura de la Declaración Universal de los Derechos Humanos ha centrado también el acto de protesta de los representantes de la Plataforma Internacional "Cuba Democracia ¡Ya!".
Como cada 10 de diciembre, los exiliados cubanos en Madrid se han manifestado ante la embajada de su país para reclamar al gobierno de Raúl Castro que respete los derechos humanos de los cubanos, porque "no es que en Cuba se violen los derechos, sino que no hay derechos", ha dicho el presidente de la plataforma, Yuniel Jacomino.
"En Cuba no hay libertad de expresión, ni de movimiento, ni de asociación. Tampoco la hay para escoger la educación de los hijos, ni para vivir una vida digna con un salario digno, y hemos venido a recordárselo a estos señores que son cómplices de la dictadura, de las torturas y del apresamiento de personas por su opinión".
Sin embargo, los derechos humanos no sólo se vulneran fuera de nuestras fronteras. Según la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, el Gobierno español tampoco los garantiza, al menos para las 113.000 personas que desaparecieron durante la represión franquista y que son ignoradas por el Estado.
El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) también ha denunciado la precaria situación de las personas con discapacidad en España que, pese a las proclamaciones más formales que reales contenidas en las leyes, ven vulnerados sus derechos día a día con obstáculos y restricciones que les impiden llevar una vida independiente.
En la misma línea, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) ha denunciado la desprotección de este colectivo, que es uno de los que tiene mayor riesgo de exclusión social según el Consejo de Europa".
La Agrupación de Retórica y Elocuencia del Ateneo de Madrid ha entregado los Premios Nicolás Salmerón de Derechos Humanos, que pretenden hacer público el reconocimiento de las personas y entidades que sobresalen en su labor contra la injusticia.
Entre los premiados de este año se encuentran el cineasta Benito Zambrano, el exalcalde de San Sebastián Odón Elorza y, a título póstumo, la escritora Dulce Chacón.