El Museo Reina Sofía se adentra en la obra de Cristina Iglesias

El Museo Reina Sofía acoge desde este martes hasta el 13 de mayo la mayor retrospectiva realizada hasta la fecha sobre Cristina Iglesias, con más de cincuenta piezas a través de las cuales se examina la amplia producción de la artista desde los inicios de su cararera a mediados de los ochenta, hasta la actualidad.

Para el director del Museo, Manuel Borja-Villel, la muestra 'Cristina Iglesias. Metonimia' no pretende ser "exhaustiva", pero sí busca recoger de alguna manera las "intenciones y el trabajo" de Iglesias durante más de treinta años.

A través de una treintena de esculturas, algunas de ellas de más de nueve metros de longitud y realizadas en materiales diversos, la exposición quiere subrayar aquellos aspectos sobre los que se fundamenta el trabajo de Iglesias, que permiten comprender tanto la orgánica evolución de su lenguaje como la maduración de su concepto del espacio y de la práctica escultórica a lo largo de los años.

Con este objetivo se ha planteado un recorrido más temático y sensorial que cronológico, de manera que cuando el visitante atraviesa las salas se ve incitado a habitar y deambular por los diferentes caminos que configuran las obras. Esta experiencia laberíntica se ve amplificada por los efectos de luz, por los claroscuros que potencian la propia configuración de las piezas y por las distintas sombras que se dibujan en el suelo.

Borja-Villel ha añadido que Cristina Iglesias es una de las artistas "que más han contribuído a la renovación del arte plástico y con mayor proyección internacional, que se mueve entre la escritura y la arquitectura, lo abstracto y lo figurativo". "Hay en ella un cierto principio barroco, que la hace teatral y de algún modo explica su complejidad", ha agregado.

Por su parte, la artista ha admitido que trabajar en el Reina Sofía ha sido una "experiencia maravillosa", al tiempo que ha manifestado su intención de "despertar los sentidos del espectador y crear una experiencia", a través de una "obra sensible al espacio que ocupa".

Iglesias ha defendido que "el arte es importante en nuestra educación y los ciudadanos deben poder encontrarse con cosas que les hagan pensar". "Que se lea poesía, se escuche música, se atienda al arte y se enseñe a mirar", ha reclamado.

Cristina Iglesias, Premio Nacional de las Artes Plásticas 1999, es una de las artistas españolas que goza de mayor reconocimiento internacional. Ha representado a España en la Bienal de Venecia de 1986 y 1993, y a su consagración contribuyó la muestra que le dedicó el Guggenheim de Nueva York en 1997. Además, ha realizado diversas muestras individuales en los principales museos del mundo, muchos de los cuales cuentan con obras en sus colecciones.