Los funerales de Whitney Houston comenzaron hoy en la iglesia baptista de New Hope en la ciudad de Newark (Nueva Jersey) con cantos y palmas de un coro de gospel vestido de blanco en honor a la artista, fallecida hace una semana.
Alegres himnos y aleluyas del coro de la iglesia donde se inició en el mundo de la música recibieron a las personalidades que asisten a las exequias por la artista en esta localidad que la vio nacer.
El oficio comenzó con la intervención del párroco de la iglesia y Ministro de Música de New Hope, seguida por una alocución del alcalde de Newark, Cory Booker recordando a Houston "como uno de nuestros ángeles".
"Estamos aquí para llorar una pérdida (MOURN) y celebrar una vida", dijo el alcalde.
En el exterior, algunos fanáticos junto a una pantalla que dice "Whitney, we will always love you (Whitney, siempre te querremos)" y con globos de colores azules, blancos y rojos, despidieron a la artista de 48 años, fallecida hace una semana en el hotel de Los Angeles, en donde se encontraba para asistir a los premios Grammy.
Este ceremonia es un funeral privado de la familia Houston, pero puede seguirse en directo a través de internet y también está siendo retransmitido por algunas cadenas de televisión.
Unas 1.500 personas arropan a la familia en el servicio religioso, que empezó a las 17.00 GMT y en el que el cantante de gospel Marvin Winans es el encargado de pronunciar el discurso panegírico, mientras que Kevin Costner, protagonista con Houston en 1992 de la película que la lanzó al estrellato, "The Bodyguards", también tendrá una intervención en su memoria.
Houston falleció por causas que aún están investigándose, pero que se sospecha podrían haberse debido a una combinación de medicamentos antidepresivos y alcohol.
A los servicios religiosos asisten numerosas celebridades, entre las que se incluye sy mentor, Clive Davis, y cantantes como Chaka Khan, Stevie Wonder, Alicia Keys y R. Kelly, que interpretarán alguna canción en el servicio religioso.
Su madrina, la mítica Aretha Franklin, al final no asistió al funeral por encontrarse enferma después de su actuación del viernes en el Radio City Hall de Manhattan.
A la ceremonia asisten también amigos cercanos de la artista, como Henry Hamilton, el director de la escuela de Nueva Jersey que lleva su nombre, y que a su llegada a la iglesia dijo a la prensa que la cantante "hizo una gran contribución a la sociedad y al mundo".
