La depresión y el suicidio "dan miedo" y aún son tabú para la sociedad, especialmente entre los jóvenes, pero las autoras de literatura juvenil Iria G. Parente y Selene M. Pascual quieren "sacar de debajo de la alfombra" todos los temas ocultos que "merece la pena contar".
Parente y Pascual, amigas desde hace 14 años, han escrito juntas 14 novelas desde 2014, un trabajo creativo en el que la diversidad y la inclusión están muy presentes. En sus dos últimas obras abordan la discriminación LGTBI ("La flor y la muerte") y la depresión ("Alma y los siete monstruos").
"La realidad es diversa y tiene muchas problemáticas que merece la pena contar. Hay que sacarlas de debajo de la alfombra y airearlas. Tanto nosotras como la actual generación de autores de literatura infantil y juvenil estamos haciendo un esfuerzo activo para mostrarlas", explica a Efe Iria G. Parente.
Parente considera que la literatura infantil y juvenil ha experimentado una gran evolución en los últimos años porque aunque siempre ha hablado de temas complejos y ha intentado transgredir las normas, "había temas prohibidos y parecía que había que sobreproteger a los jóvenes".
"El mundo ha evolucionado, hace seis años tener protagonistas abiertamente LGTB (lesbianas, gais, trans o bisexuales) era algo que no veías", reconoce la autora.
Sin embargo, aún hay camino por recorrer, sobre todo en lo relativo a salud mental y suicidio, temas sobre los que existen "muchísimo prejuicio, tabú y miedo": "Al final es miedo, no es una censura activa, es meter los temas debajo de la alfombra porque pensamos que si no hablamos de ello no va a tocar a nuestros jóvenes".
Sin embargo, estas escritoras defienden que cuanto más se hable de salud mental antes se podrá identificar que algo va mal, cuanto más se aborde el suicidio, más se podrá prevenir.