Leiva arrancó este jueves en La Riviera madrileña su maratón de cuatro recitales consecutivos (todos ellos con entradas agotadas desde hace semanas) presentando su segundo disco en solitario, 'Pólvora'. A 2.600 personas por noche, las cuentas avalan al músico madrileño. Con su fórmula de rock accesible y letras cotidianas, Leiva conectó desde el primer momento con un público que lo cantó todo desde el principio hasta el final en un constante crescendo que convirtió La Riviera en un karaoke tan jovial como ensordecedor.