La cantante de pop Lady Gaga cerró el sábado una manifestación europea por los derechos homosexuales en Roma, con un emotivo llamamiento para que los gobiernos defiendan a las minorías sexuales.
"Hoy y todos los días luchamos por la libertad. Luchamos por la justicia. Pedimos compasión, comprensión y sobre todo queremos igualdad plena ahora", gritó ante una multitud de varios cientos de miles de personas reunidas en el Circo Máximo.
"Tenemos el mismo ADN. Simplemente 'nacimos así'", aseguró, utilizando el título de su último álbum (Born this way).
Luciendo el pelo teñido de verde y un traje del fallecido diseñador Giani Versace, la artista señaló que estaba "enfadada" con varios gobiernos en Europa y Oriente Próximo que discriminaban a los homosexuales.
"Soy consciente de que muchos países y gobiernos en todo el mundo todavía restringen a sus ciudadanos que lean sobre temas relativos a los homosexuales, lesbianas, bisexuales y transexuales (LGBT por sus siglas en inglés) y esto es lo que más me importa en mi carrera. Yo quiero que sus historias sean escuchadas por el mundo", afirmó.
La cantante mencionó a Rusia, Polonia, Lituania, Hungría y Líbano.
"Nos reunimos aquí para pedir el fin a la intolerancia", gritó antes de acompañar su voz con un piano con el que interpretó versiones acústicas de sus canciones.
Las autoridades de Roma temían que lanzara ataques directos al papa Benedicto XVI o al Vaticano sobre su postura en relación a los homosexuales, pero la cantante no los mencionó.
La artista se limitó a decir que respetaba la religión, pero que las religiones debían admitir y aceptar la diversidad humana.
Su último disco "Born This Way" escaló hasta el primer lugar de las listas en Reino Unido este mes, después de vender más copias que el resto de los 10 primeros lugares juntos.