El nuevo Centro Botín de Santander marcará una "diferencia clara y positiva"

  • La Fundación, que ha invertido 80 millones de euros en el proyecto, no se marca objetivo de visitantes e impacto económico por el momento

El Centro Botín se ha presentado al mundo para dar a conocer su proyecto cultural de "primer orden", que no tendrá "fronteras" y que marcará una "diferencia clara y positiva" con otros museos o centros artísticos por su influencia y relación en el ámbito local. De esta forma, el edificio construido junto a la bahía de Santander nace como el "proyecto más social, más global y más local" de la Fundación Botín, tal y como quiso en 2010 su entonces presidente, Emilio Botín, y encargó al arquitecto genovés Renzo Piano.

"Creo que el edificio responde de forma precisa a lo que en su día mi padre encargó a Renzo Piano", ha ensalzado Javier Botín, presidente de la Fundación Botín e hijo del banquero fallecido en septiembre de 2014 cuando el centro estaba en obras.

Javier Botín ha sido el encargado de abrir el acto de presentación del Centro Botín a los medios de comunicación antes de que este viernes, 23 de junio, tenga lugar su inauguración oficial con la presencia de los Reyes de España.

En esta presentación también ha intervenido Renzo Piano, quien ha contado en el desarrollo del proyecto con la colaboración de 'luis vidal + arquitectos' y ha asegurado estar "encantado y feliz" con el resultado porque sus características responden a las directrices que le dio en su día Emilio Botín, "un hombre enamorado del mar y de su bahía".

Junto a él, planteó la construcción de este edificio en voladizo, que "parece que está volando y flotando" sobre el mar, y que, además estar bien integrado en la ciudad gracias a la remodelación de los Jardines de Pereda realizada por el paisajista Fernando Caruncho y el soterramiento del tráfico a través de un túnel, permite "ver el mar y que se refleje la luz".

Precisamente, el mar y la luz son los dos elementos que han marcado el proyecto del Centro Botín desde los primeros bocetos del diseño, que buscaba que estos fluyesen de forma "natural" a través del edificio, algo que cree que se ha conseguido.

"Es un edificio que corteja al agua" y refleja en sus más de 270.000 piezas de cerámica la luz, que también deja pasar a través de las grandes cristaleras que tienen al norte y al sur los dos volúmenes que tiene el centro y que están unidos por la plaza del Pachinko.

El presidente de la entidad filantrópica ha destacado que, con este Centro, la Fundación Botín continuará cumpliendo con su "función social" para la que fue creada en 1964 por Marcelino Botín y Carmen Yllera y que era "promover el desarrollo social" de Santander y Cantabria.

"El Centro Botín es un paso más en su larga trayectoria de trabajo filantrópico" y es un paso "muy importante" para el que ha agradecido la colaboración por parte del Ayuntamiento de Santander, el Gobierno de Cantabria y la Autoridad Portuaria.

Junto a Javier Botín, han intervenido en el director de la Fundación, Iñigo Sáenz de Miera; la directiva ejecutiva del Centro Botín, Fátima Sánchez; el director artístico, Benjamin Weil; y el arquitecto Renzo Piano, entre otros.

UN CENTRO QUE NO TENDRA FRONTERAS

Sánchez ha destacado la vocación internacional del Centro Botín en el mundo del arte, para lo que acogerá "una programación artística de excelencia", pero que "aportará una visión nueva de las artes poniéndolas al servicio de las personas y de la sociedad" a nivel local. "Estamos convencidos que ser un centro global y al mismo tiempo local es posible y necesario. Las artes no tienen fronteras y el Centro Botín tampoco debe tenerlas", ha manifestado la directora ejecutiva. Asimismo, Sánchez ha apostado por integrarse no sólo en las redes internacionales sino generar una red cultural de "primer orden" en el norte de España, donde se encuentran también el Museo Guggenheim en Bilbao y el Centro Niemeyer en Avilés.

En este sentido, también Benjamin Weil ha ensalzado el trabajo en red será "esencia" del centro Botín al igual que en el resto de museo y centros culturales, porque es algo "inherente" a las artes. "No se puede trabajar solo", ha dicho. Además del objetivo cultural y artístico, Sánchez ha ensalzado que este centro también busca generar desarrollo y riqueza de la ciudad de Santander y la comunidad autónoma de Cantabria, así como su posicionamiento global.

Pero también "enriquecer la vida" de los ciudadanos para lo que el Centro Botín continuará impulsado la formación, el desarrollo de la creatividad o la inteligencia emocional a través de las artes, en lo que la Fundación tiene 15 años de experiencia y desarrolla múltiples programas para universitarios, escolares o familias.

80 MILLONES DE INVERSION

La construcción del edificio del Centro Botín, que ha incluido también la ejecución de un túnel para soterrar el tráfico y la remodelación de los Jardines de Pereda, ha supuesto una inversión de 80 millones de euros que ha costeado íntegramente la Fundación Botín.

Las obras se iniciaron el 19 de junio de 2012 y, tras varios retrasos y cinco años de construcción cuando inicialmente estaba previsto que concluyese en tres, el centro se inaugurará este viernes, a partir de las 12.45 horas, con el acto institucional que presidirán los Reyes y con un evento cultural de danza, luz y sonido, así como fuegos artificiales, para celebrarlo con los ciudadanos por la noche.

Tras su apertura, el centro contará con tres exposiciones: una de Carlsten H÷ller con su primera muestra en España y que él mismo ha definido hoy como "un parque de atracciones de la mente"; otra de dibujos de Goya y una tercera con piezas de la colección permanente de la Fundación Botín, de cuya organización se encarga la Comisión Permanente de Artes Plásticas encabezada por Weil.

De cara a su puesta en marcha, la Fundación Botín decidió que los santanderinos y los cántabros no tuviesen que pagar entrada y pudiesen tener un pase permanente, que ya han hecho más de 70.000 personas.

Cuestionado por cifras de inversión anual y objetivo de visitantes e impacto económico, el director de la Fundación ha indicado que, aunque tienen muchos estudios "unos más pesimistas y otros más optimistas", les "interesa primar la calidad de las visitas más que el número" por lo que no se marcan esos objetivos de momento.