El Museo Thyssen-Bornemisza acoge la exposición 'Sonia Delaunay. Arte, diseño y moda', que muestra la obra de la artista rusa, con el foco puesto en los años en los que residió en Madrid, a través de más de 200 de piezas. "Hay que exaltar la inmensa variedad y el carácter multimedia de su obra, que no conoce límites. Nuestra exposición tiene ese carácter multimedia", ha señalado el director artístico del museo, Guillermo Solana.
Igualmente, Solana ha apuntado que la selección tiene un "punto de partida muy concreto", que es el centenario de la llegada a Madrid de la artista con su marido (1917), el también pintor Robert Delaunay. "En Madrid tuvo que abandonar la pintura para ser diseñadora, y descubrió las fórmulas que luego desarrollaría con éxito en París", ha concretado.
Además de colaborar en "tándem" con su marido, Solana ha destacado la colaboración de Sonia Delaunay con "múltiples artistas" como Serguéi Diághilev, Igor Stravinski o Manuel de Falla, y con los grandes almacenes holandeses Metz & Co. "Hay que destacar la variedad de medios de su obra y la fantástica delicadeza en la ejecución del material", ha comentado Solana.
La muestra, que cuenta con la colaboración de la Comunidad de Madrid, la componen pinturas; libros y escenografías teatrales; diseños publicitarios, de interior y de moda; telas; y vestidos, procedentes de instituciones públicas como el Centro Pompidou, la Biblioteca Nacional de Francia, el Museo de la Moda de París o el Museo Reina Sofía; y de colecciones privadas.
Durante la presentación, la comisaria de la exposición, Marta Ruiz del Arbol, ha asegurado que se trata de la "primera retrospectiva de la artista en España", y que refleja la "infinita capacidad para reinventarse y cambiar el plumaje" de Sonia Delaunay (1885-1979).
EXPERIMENTAR CON EL COLOR Y EL DISEÑO DE ROPA
"Experimentó con el color pintando, diseñando ropa o decorando interiores. Uno de sus principales lienzos está pintado sobre una tela de colcha", ha explicado la comisaria, que también ha subrayado que su obra muestra su "amor por el color" y por "unir arte y vida".
En la misma línea, ha añadido que el matrimonio creó un arte que "quería plasmar los contrastes de los colores" y analizar el "impacto de la luz" sobre ellos, con el fin de buscar la "abstracción". "Su etapa en Madrid es importante por lo que supone su conexión de unir arte y vida. Tuvo que abandonar Francia huyendo de la I Guerra Mundial y la artista se tiene que reinventar en Madrid", ha señalado Ruiz del Arbol, al tiempo que ha afirmado que, gracias a su etapa madrileña, se convirtió en una de las diseñadoras que "viste a la mujer moderna", convirtiéndola en "pintura viva".
Según ha indicado la comisaria, la artista rusa se "hartó" de decir que dedicarle tiempo al textil "no suponía rebajarse", ya que para ella "tenía la misma importancia que un autorretrato o un bodegón". "Sonia sorprende y enamora. Dejemos que su arte entre en nosotros", ha dicho.
Por su parte, el director de la Oficina de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid, Jaime de los Santos, ha apuntado que el "particular" modo de ver de Sonia Delaunay "dejaría huella" en la historia, y que "modernidad" es la "mejor palabra" que define a la artista.
Por último, de los Santos ha destacado que el matrimonio Delaunay arrojó "todo lo pretérito por la borda" y se adelantó a una "necesidad futura". "Nos encontramos ante una de las obras más sensibles y poéticas de las vanguardias. Era una mujer rompedora", ha concluido.