La feria de arte ARCO arranca este miércoles su 32º edición en Ifema con la participación de 201 galerías de 27 países y afronta el año más difícil de la trayectoria, con un contexto de crisis económica y una dificultad añadida: el aumento del IVA al 21% por ciento que amenaza la competitividad de las galerías españolas en el mercado internacional.
Según señaló durante la presentación el director de ARCO, Carlos Urroz, aunque todo el mundo está de acuerdo en que el aumento de los impuestos indirectos no es bueno "ni para el mercado ni las galerías", si el coleccionista ve "buenas piezas" hará "todo lo posible" por tenerlas.
Más de 2.000 artistas, 150 profesionales internacionales, miembros de patronatos de adquisiciones, directores de museos y comisarios, junto a más de 250 coleccionistas invitados de todo el mundo, acudirán a esta cita, que este año cuenta con un presupuesto "más ajustado", según Urroz.
El director de la feria señaló, que ARCO "cumple sus objetivos, tiene un presupuesto equilibrado y lo que ingresa, lo gasta", al tiempo que ha señalado que la feria está "totalmente a flote" y afirma que seguirá adelante en futuras ediciones
A esta feria de arte acudirán "muchos compradores de Latinoamérica y Centroeuropa". Sin embargo, también hay algunos países ausentes y grandes objetivos: "Afianzar la presencia en Europa del norte, Estados Unidos y mercados emergentes como China, nordeste asiático o Emiratos Arabes", ha señalado.
Además, ARCO Collect on line, arranca este jueves con la venta de más de 1.000 obras de las galerías participantes, una apuesta digital a la que se suman propuestas novedosas como ARCO Bloggers, la versión navegable del Catálogo y los Códigos BiDi de Artistas Destacados.
Los pabellones 8 y 10 de la Feria de Madrid reunirán a galerías procedentes de prácticamente todos los continentes, aunque este año el invitado especial es Turquía, país que estará representado por 10 galerías turcas.
El año pasado una de las obras estrella que más llamó la atención fue una escultura de Franco metida en una máquina de refrescos. Este año, el arte turco será "una de las grandes sorpresas de la feria, tanto por sus lenguajes como por su formato", ha afirmado Urroz.
"Animo a que la gente descubra un poco más los artistas, que no siempre la pieza más llamativa es la más interesante. Los buenos artistas suelen ser muy calmados en su presentación", ha concluido.
UN 66% DE PARTICIPACION EXTRANJERA
Uno de los puntos fuertes es la participación extranjera que, lejos de disminuir o mantenerse, aumenta un tres por ciento respecto a la edición pasada y se sitúa en el 66 pro ciento del total.
Debido a que "el gasto público en arte contemporáneo ha ido disminuyendo durante los últimos dos o tres años", se ha hecho un "esfuerzo adicional" en la captación de coleccionistas extranjeros de Latinoamérica o Centroeuropa, ya que eso puede compensar la falta de compras institucionales, como comunidades autónomas o ciudades.
Sin embargo, matiza que aunque el modelo de negocio está dirigiéndose a una perspectiva "más internacional", se mantienen las compras de grandes colecciones, como las del museo Reina Sofía, la Comunidad de Madrid o la Fundación Mapfre.