SIMA 2016 cierra sus puertas con la recuperación del público joven

  • Con un 5 por ciento más de visitantes

La 18ª edición del Salón Inmobiliario de Madrid (SIMA) cierra este domingo sus puertas tras cuatro días en los que se ha podido constatar la vuelta de la confianza al registrarse mayor actividad, con entorno a un 5 por ciento más de visitantes y la recuperación del público joven de entre 25 y 35 años que busca su primer hogar.

A falta de conocer los datos definitivos de la edición en la que SIMA cumple su mayoría de edad, se ha contabilizado un incremento de visitantes del 5 por ciento, "el línea con lo esperado", en una feria en la que ha destacado ya "la calidad del público visitante y el interés de compra que transmiten los expositores", con más de 200 expositores, un 25% más que en la edición anterior, y un 30% más de superficie contratada, ha explicado en declaraciones a Europa Press el director general del salón, Eloy Bohúa.

"Se confirma la recuperación de los visitantes más jóvenes que había perdido un poco de protagonismo en años anteriores", valora Bohúa, quien insiste en que la impresión recibida por los expositores es "positiva" en un contexto en el que el ritmo de compraventas e hipotecas evoluciona al alza, lo que en la feria "no puede ser una excepción".

Sin poder hablar todavía de una confirmación contundente, Bohúa señala que sí se puede hablar de que el mercado "poco a poco se va normalizando y vuelve la confianza", como evidencia la mayor actividad de una feria en la que la oferta de viviendas sobre plano y en construcción ha superado ya a la vivienda terminada.

"Es un síntoma de confianza de las empresas que apuestan por los nuevos proyectos y de que la demanda va a ser capaz de interesarse por ello".

Por ejemplo, en zonas de la Comunidad de Madrid se ha concertado una parte importante de la oferta de la feria, con bastantes nuevas promociones realizadas en SIMA, si bien la oferta inmobiliaria de esta edición ha dependido menos de la Comunidad de Madrid que en ediciones anteriores. Si en los últimos años lo habitual era que la oferta madrileña rozara el 60% de la oferta total de la feria, este año está por debajo del 50%.

Además, por primera vez desde el estallido de la burbuja inmobiliaria, la oferta de proyectos de venta sobre plano en el Sima ha superado al producto llave en mano, de forma que la proporción es de un 60 por ciento de nuevos proyectos frente a un 40 por ciento de promociones en stock.

El 68 por ciento de las promociones que se han comercializado estos días en la feria se ha correspondido a primera vivienda, con un 83% de precio libre y el 17 por ciento con algún tipo de protección, mientras que el resto han sido residencias vacacionales.

EXPOSITORES INTERNACIONALES "CUMPLEN EXPECTATIVAS"

A este positivo balance del SIMA 2016 también ha contribuido el mayor peso internacional de la edición, que, tras varios años sin apenas presencia de expositores de fuera España, este año ha pasado de 4 a 12 países (México, República Dominicana, Perú, Panamá, Brasil, Colombia, Bolivia, Hungría, Portugal, Reino Unido, Estados Unidos y Singapur), que han comercializado una oferta residencial en la que ha primado la segunda residencia pensada para el pequeño inversor.

"España no era un país atractivo para ningún operador internacional y esto ha cambiado radicalmente", ha apostillado Bohúa, quien ha valorado que "las empresas internacionales no son ajenas a la información sobre la evolución de la economía española, que está influyendo en la evolución del sector inmobiliario". "Hay más confianza en que los proyectos que presentan van a tener acogida", lo que ha propiciado que SIMA recupere el pulso internacional y "parece que con buen resultado, cumpliendo expectativas", ha apuntado.

A su vez, el inicio de la recuperación del sector inmobiliario también ha tenido su reflejo en SIMAPro, la principal novedad de la edición de este año, un espacio dedicado exclusivamente a empresas y profesionales, en el que se han podido percibir las sensaciones entre los promotores, entidades financieras, agentes inmobiliarios y empresas de servicios.

"El clima que se respira es de mayor optimismo y de hablar de futuro", señala Bohúa, quien detalla que en SIMAPro y en los foros celebrados en el marco del SIMA se ha hablado de nuevos proyectos y de "poner el foco en el cliente", de cómo resolver el problema para ofrecer una vivienda al comprador más joven dada las dificultades de desempleo y bajos salarios, así como de "transparencia, tecnología, innovación, cosa que no ocurría el año pasado".

"El balance es positivo y continuaremos con ello en futuras ediciones", ha avanzado Bohúa. El director general del SIMA ha reconocido que en los pasillos y stands del SIMA también se ha tratado el panorama de incertidumbre política existente en España, si bien "esta incertidumbre no parece que de momento esté afectando al mercado residencial".

Esto se sustenta en el hecho de que las últimas estadísticas del INE sobre compraventas e hipotecas mantienen una tasa de incremento interanual de dos dígitos, por lo que "el mercado sigue tirando". "Hay un cierto sentimiento de optimismo que es buen para todos. La reactivación del sector inmobiliario llevará pareja nuevos proyectos y por consiguiente la generación de puestos de trabajos", ha pronosticado.