Cada detención de un narcotraficante, cada banda desarticulada de delincuentes organizados de países de Este, cada célula terrorista detectada, en definitiva, cada éxito policial, suponen miles de horas de trabajo de los cuerpos y fuerzas de seguridad: Treinta Minutos ha querido acompañar a los cuerpos policiales que operan en la región, Guardia Civil, Bescam y Policía Nacional, en distintas operaciones desarrolladas en tiempo real, para ser testigos de su trabajo, una combinación de alta cualificación, grandes dosis de dedicación y no pocos riesgos.
Según los delincuentes han ido aumentando en sofisticación, las fuerzas de seguridad, desde tierra y desde aire, han ido incorporando las más modernas tecnologías para la detección y represión del delito.
Treinta Minutos ha acompañado a varias patrullas de la Bescam en una operación real de interceptación de una red implicada en el tráfico de drogas en el área de Alcorcón: agentes infiltrados de paisano se introducen en un determinado bar y se camuflan entre los clientes compradores de estupefacientes y los camellos suministradores; después, los agentes uniformados entran de improviso y proceden a las pertinentes detenciones. Treinta Minutos ha podido asimismo comprobar cómo los agentes de la Bescam interceptan vehículos robados y cómo detectan el menudeo de drogas a las puertas de los institutos.
El denominado G.O.T.I. (Grupo Opeativo de Intervenciones Técnicas) tiene la misión de apoyar con medios electrónicos e informáticos las investigaciones de otros grupos: detectan zulos empleados en secuestros exprés mediante el empleo de densiómetros en las paredes, y de cámaras en chimeneas y conductos del aire. Este grupo dispone de aparatos que son capaces de detectar falsos fondos con droga en vehículos trucados que emplean los delincuentes para eludir los controles.
El programa ha comprobado cómo trabaja el helicóptero de la Policía Nacional, dotado de cámaras de HD con zoom estabilizador: estos dispositivos permiten una nitidez y una aproximación detallada prodigiosa desde el aire, en coordinación con las patrullas de tierra. El flujo de datos entre tierra y aire es ahora permanente y, hace tan sólo un par de años, hubiera sido inimaginable.
Treinta Minutos ha sido testigo de cómo la Guardia Civil establece un control antiterrorista donde están implicados siete vehículos terrestres y helicópteros en la Carretera de Colmenar Viejo; un intento de fuga por parte de un vehículo sospechoso es abortado y sus ocupantes fueron detenidos por los agentes ante las cámaras.
Por último, el Equipo de Reconstrucción de Accidentes de la Guardia Civil muestra al programa cómo trabaja para detectar delitos violentos que pudieran estar enmascarados bajo un supueste accidente fortuito de tráfico. Mediante reconstrucciones virtuales basadas en parámetros comparativos entre los vehículos accidentados que delatan anomalías que pudieran ser indicios de delitos.
