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Alberto Fabra ha jurado este jueves su cargo como nuevo presidente de la Generalitat valenciana y en su discurso se ha comprometido a trabajar por la recuperación económica y el empleo, así como para conseguir que "se vuelva a hablar únicamente en positivo de la Comunidad Valenciana". Asimismo, ha hecho hincapié en que no va a renunciar "a nada de lo conseguido" y que se esforzará por "generar confianza y volver a crecer".

Fabra ha realizado estas declaraciones durante su intervención en el acto en el que ha tomado posesión como presidente de la Generalitat, en la que no ha hecho ninguna referencia a su antecesor en el cargo, Francisco Camps, con quien, desde este jueves, se ha intercambiado el sillón. Así, Fabra ha pasado a la primera fila, mientras que Camps, que continúa como diputado, se sienta en la tercera, entre las alcaldesas de Valencia y Alicante, Rita Barberá y Sonia Castedo.

El nuevo jefe del Consell ha jurado su cargo y, a continuación, ha pronunciado una 'proposición' sobre su programa de gobierno, que ha finalizado con los miembros del PP en pie y con un aplauso de los parlamentarios de las bancadas 'popular' y socialista.

En la tribuna de invitados del hemiciclo de las Cortes destacaban algunas personalidades como el ministro de Educación, Angel Gabilondo, el vicepresidente del Consejo General de Poder Judicial (CGPJ), Fernando de Rosa y representantes del mundo empresarial, judicial y educativo. Finalmente, no ha acudido ningún miembro de la dirección nacional del PP.

Alberto Fabra, que ha entrado en el hemiciclo acompañado por el portavoz del PP, Rafael Blasco, y por el diputado y secretario general del PPCV, Antonio Clemente, ha destacado que ser presidente de la Comunidad Valenciana "es el máximo honor al que puede aspirar todo aquel que tenga vocación de servicio público y crea en esta tierra y en este pueblo".

El nuevo presidente valenciano ha hecho hincapié en la importancia de la "cercanía" a los ciudadanos y, en este sentido, ha indicado que recorrerá la Comunidad "escuchando a la gente, porque es la única manera que conozco de hacer política". Asimismo, ha destacado que se presenta ante las Cortes "con humildad y con ilusión, con fuerza y ambición y, sobre todo, con responsabilidad".

Asimismo, ha subrayado que "del esfuerzo de todos nacen los mejores proyectos" y, por este motivo, ha señalado que su proyecto de Comunidad Valenciana "suma y no resta; multiplica y no divide". En esta misma línea, ha asegurado que se trata de un proyecto "lleno de consensos, que se construye con el mismo espíritu de la Declaración de Castellón de 2005".

Al respecto, ha explicado éste fue "un gran acuerdo" que "unió a alcaldes de diferentes territorios e ideologías en defensa del Corredor Mediterráneo", una infraestructura que, a su juicio, representa "la mejor opción de prosperidad y progreso para el conjunto de España". "No voy a desfallecer en exigir y reivindicar", ha resaltado.

Fabra, que ha intercalado el castellano y el valenciano en su discurso, también ha abogado por que la Comunidad sea "leal y solidaria" con el resto de España, ya que está convencido de que "el futuro de España es responsabilidad de todos los españoles, vivamos en la comunidad autónoma que vivamos".

El nuevo presidente del Ejecutivo valenciano ha explicado que desarrollará un proyecto centrado en la recuperación económica; en la creación de empleo; en la garantía de una sanidad, educación y servicios sociales "de calidad"; en "la convivencia, el diálogo, la libertad y el respeto"; en alcanzar "equilibrio" y "mesura; y en conseguir que sean realidad "la llegada del agua, del Corredor Mediterráneo y del AVE a Alicante y Castellón, en el plazo más breve posible".

UN PRESIDENTE CON LA MIRADA PUESTA EN EL FUTURO

Alberto Fabra se ha comprometido a ser un presidente "con la mirada puesta en el futuro" y ha dicho que éste "solo pasa por crear empleo y acabar con la crisis económica". Para conseguir esto, ha señalado que cuenta "con todos los alicantinos, valencianos y castellonenses", con sus "compañeros del gobierno, del grupo parlamentario y del PP", así como con su experiencia ante la Alcaldía de Castellón y con su familia.

Del mismo modo, ha incidido en que aspira a conseguir que "se vuelva a hablar únicamente en positivo de la Comunidad Valenciana", para que esta autonomía siga siendo "un lugar de referencia nacional e internacional". "El mejor y más atractivo territorio para innovación, progresar y hacer realidad las oportunidades de las personas y las familias", ha apostillado.

Fabra ha asegurado que trabajará para defender los intereses de la Comunidad Valenciana "con entrega y dedicación" y que lo hará "sin descanso, por el bienestar y el futuro de todos los ciudadanos de la Comunidad".

INVITADOS

A la toma de posesión de Fabra han asistido, además de Angel Gabilondo y Fernando de Rosa; la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Ana Botella; los presidente de las diputaciones de Alicante y Castellón, Luisa Pastor y Javier Moliner, --también ha acudido el presidente de la corporación provincial de Valencia, Alfonso Rus, que es diputado autonómico--; el presidente provincial del PP en Castellón, Carlos Fabra; y los rectores de las ocho universidades de la Comunidad.

También han acudido la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), Pilar de la Oliva; el ex presidente de la Generalitat José Luis Olivas; la senadora Carmen Alborch, y el diputado del PP en el Congreso, Ignacio Gil Lázaro. Asimismo, el acto ha contado con la presencia del presidente del Comité Económico y Social (CES) de la Comunidad Valenciana, Rafael Cerdá; el presidente del Consell Jurídic Consultiu (CJC), Vicente Garrido; la presidenta la Academia Valenciana de la Lengua (AVL), Ascensión Figueres; el presidente del Consell Valenciano de Cultura (CVC), Santiago Grisolía; el Síndic de Comptes, Rafael Vicente; y el Síndic de Greuges, José Cholbi.

Del mismo modo, han asistido numerosos representantes empresariales y sociales, como el arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro. También han arropado al nuevo jefe del Consell alrededor de 150 alcaldes, algunos familiares y los miembros de la corporación municipal de Castellón.