La copa de la Champions llega a la Plaza del Duomo de Milán, donde cientos de aficionados se concentran para hacerse una foto. El gran momento fue la llegada a la plaza del Duomo donde la estaban esperando Cafú, embajador de la Champions, y el alcalde de la ciudad, Guilano Pisapia, los encargados de recoger de manos de los carabinieri el trofeo.