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El mundo del esquí rindió hoy en Madrid un homenaje a Paquito Fernández Ochoa, campeón olímpico en 1972, en el décimo aniversario de su muerte. Su hija Paula recogió una placa conmemorativa de reconocimiento del mundo del esquí a la figura de su padre en una jornada que ha reunido a sus familiares y a algunos de sus mejores amigos para recordar al campeón español.

Además, se ha celebrado una coreografía sobre la pista madrileña SnowZone que ha convocado a más de 70 deportistas entre los que han estado algunas de las principales figuras del esquí español como María José Rienda o Jordi Font.

Paquito Fernández Ochoa sigue siendo la única medalla de oro española en unos Juegos Olímpicos de invierno.

El homenaje fue organizado por Madrid SnowZone con la colaboración de la Real Federación Española Deportes de Invierno (RFEDI), la Federación Madrileña Deportes de Invierno (FMDI) y la familia de Paquito Fernández Ochoa.

Robert Puente, séptimo en una copa del mundo de esquí extremo y promotor del homenaje, afirmó: "Los deportistas españoles le debíamos a Paquito este homenaje al que todos -Jordi Font, María José Rienda, Raquel Gutiérrez- han venido de manera totalmente desinteresada y sin dudarlo un momento al saber que se trataba de recordar a Paquito y todo el legado que ha dejado en nuestro deporte".

Blanca Fernández Ochoa, hermana de Paquito, agradeció a todos la asistencia y recordó "que era el hermano que más disfrutaba de la nieve y que hoy estaría emocionado viendo al mundo de la nieve reunido aquí y que estaría seguramente riéndose junto a todos nosotros".

A continuación se emitió un vídeo para recordar la figura de Paquito que ha dado un repaso por sus mejores momentos deportivos y sus descensos más celebrados, como el que le dio la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Invierno de Sapporo'72, mientras se escuchaban sus palabras de agradecimiento en el homenaje que su pueblo, Cercedilla, le brindó pocos días antes de morir en el que se descubrió su estatua.

El alcalde de Cercedilla, Luis Miguel Peña, destacó lo que ha supuesto la figura de Paquito para su localidad, y habló del primer Paquito "que no esquiaba como los demás, era puro nervio y lo era para todo; si te veía que estabas arreglando una valla en el pueblo ahí se ponía contigo a ayudarte. Tenía mucho fuelle y todavía lo tiene como demuestra a todas las personas que ha sido capaz de congregar hoy aquí para recordarle".

A continuación, Paula, hija de Paquito, recibió una placa conmemorativa en honor de su padre de manos de Pablo Salazar, director general de Deportes de la Comunidad de Madrid, agradeciendo a todos el emotivo homenaje a su padre. "Una de esas personas -dijo- que sin estar, está; y que a mí siempre me decía que nunca nadie te gane a reír. Nos dio una lección a todos porque supo vivir y también supo morir y aquí está hoy la gran huella que ha dejado en todos nosotros por su personalidad arrolladora".

Por último se escenificó una coreografía con representantes del deporte blanco español en sus distintas modalidades: Raquel Gutierrez, tres veces campeona del mundo junior de Esquí de Ballet; la propia Blanca Fernández Ochoa, medallista de bronce olímpica; María José Rienda, ganadora de 6 copas del mundo de esquí alpino; Jordi Font, diploma olímpico en SnowBoard Cross o Chío Delgado, campeona de Europa de SkiCross.

Los hermanos de Paquito y su hija Paula fueron los últimos en descender y cruzar un pasillo de honor formado por las jóvenes promesas del esquí para recibir un ramo de flores final y sacarse una foto junto a todos los participantes en esta coreografía histórica.