Nadie pudo eclipsar en el Coliseum Alfonso Pérez la actuación de Vicente Guaita ante el Valencia. Ni Mauro Arambarri con su expulsión, ni el gol de Markel Bergara ni el buen encuentro sin premio de Dani Parejo. Desde la barrera, el portero del Getafe se convirtió en el gran protagonista del choque.
Su equipo ganó 1-0 después de jugar durante 65 minutos con un hombre menos. La victoria del Getafe fue heroica, la consiguió con diez futbolistas sobre el terreno de juego y ante un equipo que no había perdido ni un partido en las trece jornadas de Liga anteriores.
INTERVENCINES DECISIVAS
Además, el cuadro de Marcelino García Toral se jugaba colocarse a sólo dos puntos del líder, el Barcelona, que pinchó 24 horas antes con un empate frente al Celta en el Camp Nou. Por eso, los tres puntos que consiguió el Getafe ante el Valencia son fruto del trabajo de un colectivo que se engrandeció ante la adversidad.
Pero por encima de todos destacó Guaita. Sus intervenciones fueron decisivas. Fue una pared impenetrable para el Valencia, que acabó desquiciado con sus intervenciones. El guardameta del equipo de José Bordalás marcó su territorio debajo de la portería del Getafe y provocó la derrota del que un día fue su club.
No fueron muchas sus paradas, pero en todas demostró la calidad innegable de un portero que no has sido lo suficientemente valorado a lo largo de su carrera. Su mayor víctima fue Dani Parejo, que sufrió tres intervenciones de Guaita, una de ellas imposible, en el minuto 74, cuando lanzó una falta que el portero azulón despejó al poste de forma increíble.
UN MURO
También frenó a Parejo en otros dos lanzamientos a balón parado y a Carlos Soler en el descuento con otra intervención importante tras un disparo lejano del canterano del conjunto ché, que después cubrió su rostro con su camiseta desesperado por la acción de su rival.
Y es que Guaita ha alcanzado ya su plena madurez. Con 30 años, está confirmando que es uno de los porteros más fiables de Primera División. Su actuación estelar contra el Valencia no ha sido la única. Otros equipos como el Real Madrid, el Leganés o el Deportivo ya sufrieron esta temporada al portero del Getafe.
Precisamente, el Valencia, el club en el que se formó, fue su última víctima. Estuvo cuatro años en el primer equipo y entre medias fue cedido al Recreativo de Huelva, donde fue el guardameta menos goleado de Segunda División en la temporada 2009/2010.
PORTERO REVELACIÓN EN EL VALENCIA
En su regreso al Valencia, completó un gran año con actuaciones tremendas como la que firmó ante el Manchester United en la Liga de Campeones. Después, fue nombrado portero revelación del año. Sin embargo, nunca acabó de cuajar como titular del cuadro ché, sobre todo después de la llegada al club del brasileño Diego Alves.
Al final, después de sonar para equipos como el Arsenal, recaló en el Getafe, donde ha alternado actuaciones brillantes con días intrascendentes. Su peor momento lo vivió el curso pasado, cuando se quedó en el equipo pese a bajar Segunda y Alberto García le arrebató la titularidad durante toda la campaña hasta las eliminatorias de ascenso, momento en el que volvió a ponerse bajo los palos.
Desde entonces, nadie le ha quitado la titularidad y ahora ha vuelto su mejor versión, la que en algunos partidos asombró en el Valencia e hizo soñar a la afición de Mestalla. Quienes se frotan las manos ahora son los hinchas del Getafe.
EN UN MOMENTO PERFECTO
El momento de Guaita es perfecto para su club. Tiene esa edad en la que dicen que un portero está en su mayor esplendor. Está con confianza, para casi todo y su equipo funciona. Y además, su vida personal es ordenada, con dos hijos pequeños con los que no deja de jugar al fútbol en todo momento.
El portero del Getafe respira el fútbol por los cuatro costados y espera mantenerse en ese estado de gracia durante mucho tiempo. Definitivamente, ha llegado la hora de Vicente Guaita, el portero oculto de Primera División que ha alcanzado su madurez plena y merece mucha más visibilidad.