Álvaro Arbeloa, Isco y Sergio Ramos, jugadores del Real Madrid, reconocieron tras la derrota en Balaídos ante el Celta de Vigo (2-0), que entierra sus opciones al título de Liga, que bajaron "los brazos antes de tiempo".
"Está siendo una semana difícil", reconoció Arbeloa. "El empate con el Valencia afectó psicológicamente. A lo mejor, hemos bajado los brazos antes de lo que teníamos que haberlo hecho, porque los demás equipos están fallando y si hubiéramos ganado nuestros partidos podríamos haber estado ahí". Arbeloa dejó clara la forma de pensar del vestuario madridista, que pensaba que la Liga ya estaba perdida antes de viajar a Vigo.
LA CHAMPIONS
No quiso hacer análisis de la temporada aún el lateral derecho que hoy regresaba tras superar su lesión de rodilla. "La Champions lo va a dictaminar todo, será decisiva para valorar cómo ha sido el año. La gente esta guardando energías para ese día", admitió.
En la misma línea se mostró Isco, que enfocó la final de Lisboa ante el Atlético de Madrid. "Ahora tenemos una final que es un sueño para todos. Hemos dejado escapar un Liga que teníamos difícil y pensamos más en lo que tenían que hacer otros equipos. Hemos bajado los brazos antes de tiempo y eso es impropio de Real Madrid. Toca levantar la cabeza y qué mejor manera de hacerlo que en la final de la Champions".
RAMOS: "NO HEMOS ESTADO A LA ALTURA"
Sergio Ramos, segundo capitán del Real Madrid, fue crítico con la actuación de su equipo en Balaídos, donde cayó 2-0 ante el Celta, y admitió que no estuvieron "a la altura" y enfocó la Liga de Campeones como el gran objetivo del madridismo.
"Después de haber hecho una gran temporada en esta competición el equipo no ha estado a la altura y hemos dejado escapar la Liga de una manera muy mala para nosotros. No podemos lamentarnos ni dejar que el equipo se venga abajo moralmente. Tenemos que cambiar el chip de los últimos partidos", aseguró Ramos.