Una indiscreción de Gerard Piqué ha destapado un secreto a voces, la marcha de Cesc Fàbregas del Barça después de tres años como azulgrana en los que ha mantenido una relación de amor-odio con algunos sectores de la afición. Piqué sorprendió ayer al seleccionador Vicente del Bosque al afirmar antes de una rueda de prensa en Washington que la salida de Cesc ya estaba cerrada.