La cubierta del Metropolitano, caja de resonancia para los atléticos

  • Así se instaló el anillo de la cubierta del estadio rojiblanco

Los responsables del nuevo estadio del Atlético de Madrid, el Wanda Metropolitano, explican a través de un vídeo que la cubierta, formada por una estructura de cables forrados por un tejido de fibra de vídeo y teflón, será como "una caja de resonancia" para los gritos y cánticos de los atléticos.

"Los estadios cubiertos son estadios en los que el ambiente se vive más, porque el sonido se refleja en la cubierta y vuelve a los espectadores y es como una cámara de resonancia. Más aún estas cubiertas de membrana tensada", explicó el arquitecto Antonio Cruz, responsable del estudio Cruz y Ortiz, en un vídeo en el que visita las obras del nuevo estadio rojiblanco.

4.500 TONELADAS DE ACERO

El responsable de la arquitectura del nuevo campo del club madrileño para la próxima temporada comentó los avances de la instalación de la cubierta junto con el director general de la firma alemana Schalich Bergermann Partners, Mike Schlaich, responsable de la cubierta.

"Para nosotros es un orgullo trabajar para este club tan famoso, estoy convencido que será un espectáculo para el club y los aficionados", comentó Schlaich, también desde las obras del nuevo estadio, que tendrá que estar listo para el mes de agosto, cuando comience la nueva temporada.

La cubierta del Wanda Metropolitano, cuyo anillo exterior o de compresión formado por unas 4.500 toneladas de acero ya está colocado sobre el graderío, ha sido concebida por un equipo de quince ingenieros y estará cubierta con una membrana de fibras de vidrio cubiertas por teflón.

EFECTO AUTOPIMPIANTE

"La cubierta desliza bastante y tiene un efecto autolimpiante, el agua y la suciedad se desliza del material", explicó el responsable de la compañía de ingenieros alemana, que comenzó su actividad con el diseño del estadio olímpico de Múnich en 1972 y ha preparado cubiertas similares para el estadio del Stuttgart o el de La Cartuja en Sevilla.

Este ingenio está a la espera del último paso: la elevación del anillo interior o de tracción, sujeto al anillo exterior por unos cables de acero de alta resistencia, un proceso conocido como el 'big lift'. "Ahora se conectarán los radios a los anillos de tracción, eso se hace con gatos hidráulicos. Se tensan los cables hasta que el anillo de tracción está en su posición. Es bastante complicado, es un proceso muy lento, irán subiendo lentamente", detalló Schlaich

"Es un momento complejo, con emoción, en el que se van a elevar todos estos cables hasta su posición ideal. Además tenemos un voladizo exterior de la cubierta al exterior, un alero de 16 metros de longitud que protegerán a los espectadores en su acercamiento al estadio. Cuando llegue al estadio ya estarán cubiertos por la lluvia", añadió el arquitecto Antonio Cruz.

"Nos gustaría lograr que este edificio sea el hogar de la pasión de los atléticos", añadió el arquitecto sevillano, responsable tanto del primer proyecto del estadio de la Comunidad de Madrid, conocido como 'La Peineta', como de la ampliación del Atlético hasta el próximo Wanda Metropolitano.