El portugués Tiago Mendes, medio centro del Atlético de Madrid, dijo este martes que la clasificación para las semifinales de la Liga Europa pasa por marcar gol en el duelo de vuelta en Hannover y recalcó que su equipo tiene que olvidarse de la ventaja de 2-1 de la ida en el Vicente Calderón.
"Yo creo que sí (la clasificación pasa por marcar en Alemania). Tenemos que intentar ganar y olvidarnos de que estamos en ventaja en la eliminatoria. El Hannover es un adversario muy fuerte en las transiciones, con gente muy rápida adelante y no nos podemos descuidar cuando tenemos el balón porque sabemos que ellos llegan muy rápido por las bandas y la centran muy bien por abajo", afirmó.
"Hay que cuidar todos los aspectos, porque en su casa todavía son más fuertes", continuó Tiago, que destacó la "importancia" tanto del choque de este jueves como el del próximo domingo en la Liga frente al Levante, dos encuentros que "van a definir" las opciones del Atlético en este final de temporada.
"El jueves es un partido importantísimo. Seguro que el Hannover lo va a dar todo, juega en su casa, es como una final para los dos equipos y tenemos que estar listos para este partido", añadió el centrocampista, que volverá a la titularidad después de casi un mes de baja por lesión, de la que reapareció el domingo ante el Getafe.
En ese sentido, Tiago explicó que se encuentra "bien". "Estoy con muchas ganas de volver por fin al equipo y de poder ayudar", valoró el futbolista, que ve a su conjunto "muy centrado en ir partido a partido" y que apostó por esa mentalidad: "A veces nos ponemos objetivos, los vemos ahí cerca y al final tenemos problemas".
"Tenemos un grupo muy fuerte para afrontar este tramo final de temporada", continuó el centrocampista, que recalcó: "El objetivo es pasar este jueves, porque es el partido más próximo y más importante ahora mismo. Y queda todo muy lejos. La Liga Europa está muy lejos, el título, hablar de la Liga de Campeones...".
Tiago, que no ve "cansado" al equipo, quiere levantar el trofeo de la competición europea, una vez que en 2010, cuando llegó cedido por primera vez al conjunto rojiblanco y su equipo conquistó el título de la Liga Europa, no podía jugar el torneo al haberlo disputado ya ese mismo año con el Juventus italiano.
"La viví por fuera. No tengo una espina, porque fue una alegría inmensa compartir esa felicidad de mis compañeros, aunque no pude jugar y estuve por fuera. Es mentira si digo que la siento mía, porque no la siento, porque no jugué, pero estar dentro y vivir la alegría de mis compañeros fue muy bueno. Me gustaría ganarla", dijo.