El portugués Simao Sabrosa se despidió hoy del Atlético de Madrid en una emotiva rueda de prensa, en la que incluso se le escaparon las lágrimas durante algunos momentos y en la que recordó que ha sido un "honor" vestir la camiseta rojiblanca durante tres años y medio y admitió que lo va a echar de menos.
Hoy, tras disputar anoche su último partido y marcar su último gol con el Atlético frente al Espanyol en el partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey, el extremo dijo adiós al conjunto madrileño en la sala Vip del Vicente Calderón, en la que se leía 'Gracias Simao' y en la que estuvo acompañado por Enrique Cerezo, presidente del club y también emocionado durante el acto.
"No es fácil este momento. Primero dar las gracias a todos, al club por haber confiado hace cuatro años y haberme fichado. Creo que no he defraudado a nadie. He sido siempre un profesional y siempre he tenido buena amistad con todos. En este momento me cuesta y me duele mucho salir, porque es el grupo donde he tenido más amigos. Me he sentido en casa con todos los empleados", explicó Simao.
"Siempre he tenido una sonrisa para ellos, he compartido momentos de alegría y felicidad y en los momentos de tristeza me ayudaron a salir de esos momentos menos positivos. Llegó el momento de dejar esta gran familia, de dejar de vestir esta camiseta, que me hizo más jugador, mejor persona y mejor profesional", continuó.
"Cuando llegué dije que se podía ganar un título. No hemos ganado uno, sino dos, y muy importantes", prosiguió el extremo, que recordó el "momento mágico" de anoche en el vestuario, cuando sus compañeros le esperaban tras el encuentro ante el Espanyol para despedirle antes de tomar rumbo al Besiktas turco, su próximo destino.
"No es un adiós, es un hasta luego, porque seguiré teniendo contacto con todos, seguiré como aficionado apoyando a este gran equipo. Ha sido un honor haber vestido esta camiseta durante tres años y medio y lo voy a echar de menos", afirmó un emocionado Simao.
Y explicó su salida del club, con el que terminaba contrato el próximo 30 de junio, "porque es el fútbol". "Dentro de poco estaría libre para firmar por quien quiera y sólo tengo que dar gracias al club y al presidente por haberme dado permiso de poder negociar un nuevo contrato, quizá el ultimo de mi carrera de profesional", dijo.
Su marcha al Besiktas turco pone fin a una trayectoria de tres años y medio en el Atlético, de la que siempre recordará "estos momentos" que ha vivido de "alegría, de compañerismo, de amigo". "Poca gente me conoce, pero los que han convivido conmigo saben que siempre he tenido una sonrisa y una palabra de cariño. Quiero ser recordado como un jugador ejemplar y profesional", valoró.
Tampoco olvidará nunca la despedida que le brindó anoche la afición en el Vicente Calderón, cuando, incluso minutos después de terminar el encuentro, tuvo que salir al césped de nuevo ante los cánticos de los seguidores. "Jamás lo olvidaré. Hoy no pude contener las lágrimas y ahí sí que me hice fuerte para no llorar", aseguró.
"Jamás olvidaré ese momento, como todos los momentos que pasé en este club, los dos títulos que gane y la final de Copa ante el Sevilla, con 40.000 atléticos apoyando después de haber perdido. Son momentos que jamás olvidaré. Quiero dar las gracias por el apoyo a la afición, soy uno más entre ellos apoyando a este equipo", agregó.
En sus tres años y medio en el Atlético, además, Simao ha aprendido que, "cuando todos se juntan", son "más fuertes". "Cuando todos trabajan en el mismo sentido, tienen el mismo pensamiento y la misma fuerza de querer ganar, todo es mucho más fácil. Cuando ganamos fue porque pasó eso", recordó.
"Es un gran club, tiene una historia impresionante y un presente que es importante para todos y nos deja súper felices. Hay que seguir así, confiando en estos jugadores y seguir trabajando en la misma línea para poder volver a ganar títulos", declaró Simao, que recibió una réplica de los trofeos de la Liga Europa y la Supercopa.