Saúl Ñíguez y Borja Mayoral marcaron los goles decisivos para darle a la selección española sub 21 un prestigioso triunfo por 1-2 en el amistoso ante el seleccionado italiano disputado en el estadio Olímpico de Roma.
La Rojita resolvió el duelo gracias a una primera mitad de gran nivel y, a pesar de permitir a Italia recortar distancias en la reanudación por medio de Lorenzo Pellegrini, logró hacerse con una victoria importante de cara al Campeonato Europeo del próximo junio.
ESPAÑA IMPONE SU JUEGO
Los españoles estuvieron liderados por Saúl en el centro del campo y por un Héctor Bellerín en gran estado de forma en el carril derecho y lograron imponer su juego ante una selección italiana a la que no le bastó la reacción de la segunda mitad.
Positiva también la actuación del delantero crecido en la cantera del Real Madrid Borja Mayoral, que trabajó mucho para el equipo y que mostró todo su olfato goleador en el cabezazo que supuso el momentáneo 2-0.Celades realizó ocho cambios con respecto al once que ganó 3-1 a Dinamarca el pasado jueves y dio la titularidad a Héctor Bellerín en el lateral derecho, a Saúl en el centro del campo y a Denis Suárez e Iñaki Williams en la línea ofensiva.
La Rojita encaró el duelo con agresividad y creó dos ocasiones peligrosas en los primeros siete minutos de juego liderado por la velocidad y el regate en la banda izquierda de Williams, que estuvo muy activo a lo largo de todo el partido.
PREMIO PARA LA 'ROJITA'
El extremo del Athletic Bilbao dio dos buenos balones a Borja Mayoral, pero el delantero del Wolfsburgo chocó ambas veces contra el atento arquero italiano Simone Scuffet tras rematar desde dentro del área de penalti.
Sin embargo, tras el difícil comienzo de duelo, Italia se aproximó al área española en el minuto 10 y sólo una providencial intervención del portero Pau López tras un zurdazo de Domenico Berardi permitió a la Rojita mantener el empate a cero. A pesar de ese susto, España movía bien el balón el centro del campo y lograba llegar con continuidad a rematar a portería, lo que terminó premiando a la selección de Celades.
En el 34, Saúl fue el primero en llegar en un rechace de Scuffet y envió el balón entre las mallas rematando de media chilena cuando el portero ya no podía intervenir. Esa diana cargó de confianza a los españoles, que ampliaron distancias tres minutos después gracias a Mayoral, que marcó de cabeza tras aprovechar una desviación de Adam Masina.
OCASIONES PARA MARCO ASENSIO
En la reanudación, España concedió una doble ocasión a Italia en en el 47, cuando el capitán Marco Benassi rozó el gol, primero con un cabezazo, y luego con un derechazo que se estrelló contra el larguero. Sin embargo, los españoles dispusieron de mucho espacio al contragolpe y pudieron sentenciar el choque con Marco Asensio, cuyo zurdazo impactó en el poste y con Williams, que desaprovechó una buena oportunidad cabeceando fuera.
Ese fallo dejó viva a la selección italiana, que logró reabrir el choque en el minuto 72, cuando Lorenzo Pellegrini firmó un gran gol de cabeza devolviendo opciones a su equipo. El gol del 1-2 obligó a España a defenderse en los últimos minutos aunque Jorge Meré y Diego González lograron mantener alta la línea con carácter y no concedieron ocasiones peligrosas.
Así, la Rojita logró salir con un buen triunfo del estadio Olímpico de Roma y siguió de forma positiva su preparación para el Campeonato Europeo del próximo junio en Polonia.
FICHA TÉCNICA:
Italia: Scuffet; Ferrari, Biraschi, Mandragora (Calabria, m.57), Masina (Barreca, m.84); Benassi (Grassi, m.73), Pellegrini (Verre, m.84), Cataldi (Locatelli, m.57); Berardi (Ricci, m.92), Cerri (Favilli, m.57), Chiesa (Di Francesco, m.73)
España: López; Bellerín, Yeray (González, m.53), Meré, Jonny; Llorente, Asensio (Odriozola, m.85), Saúl; Denis Suárez, Mayoral (Ceballos, m.72), Williams (Oyarzabal, m.85)
Goles: 0-1, m.34: Saúl; 0-2, m.37: Mayoral. 1-2, m.71: Pellegrini
Árbitro: Gianluca Rocchi (ITA). Mostró cartulina amarilla a Ferrari (m.41), Berardi (m.74)
Incidencias: Partido amistoso disputado en el estadio Olímpico de Roma ante cerca de 13.000 espectadores