El Ciudad Ros Casares Valencia y el Rivas Ecópolis protagonizarán mañana un duelo fratricida, el primero en la historia de la máxima competición del baloncesto europeo entre dos conjuntos españoles, en la final de la Final a Ocho de la Euroliga Femenina a la que ambos han accedido tras vencer en sus tres primeros encuentros.
Para el Ros Casares supone la tercera final de la Euroliga de su historia y, aunque dada la gran plantilla que ha confeccionado y su brillante fase previa se esperaba que pudiera estar en la final, la derrota que sufrió en la final de la Copa de la Reina había creado dudas respecto a su capacidad competitiva en las grandes citas que se han disipado.
En el caso del equipo madrileño, que vivirá su primera final, su clasificación tiene aún más mérito al ser uno de los equipos con menor presupuesto de los ocho que han participado en esta cita de Estambul y al haberse impuesto además de al Beretta Famila a los dos potentes equipos turcos, el Galatasaray, que ejercía de anfitrión, y el Fenerbahce, con el que el pasado viernes se jugó 'a vida o muerte' un lugar en la final.
El conjunto que dirige Roberto Íñiguez ha recuperado en estos tres días su mejor versión, desarrollando un juego completo en ambos lados de la pista y, sobre todo, constante pero mañana deberá vencer definitivamente al fantasma que le persigue en las últimas finales que ha disputado.
Paradójicamente, el Rivas Ecópolis es uno de los equipos que alimentó esa situación en el último gran precedente que ambos equipos protagonizaron.
Ambos equipos disputaron la final de la Copa de la Reina de 2010, en la que el Ros Casares era el gran favorito por potencial y por jugar en su pista, pero en la que finalmente se impuso el Rivas con una lección de casta y de control que le permitió sumar el primer gran título de su historia.
Eso sí, el equipo valenciano se ha sacado la espina esta temporada derrotando con contundencia al conjunto de Miguel Martínez Méndez en los dos duelos que han disputado en la fase regular de la Liga Femenina y en la semifinal de la Copa de la Reina, en la que que se impuso por 61-51, gracias en buena parte a los 17 puntos de Esahaya Murphy y a los 16 de Maya Moore.
El principal objetivo defensivo del conjunto valenciano será frenar a la estadounidense Ashja Jones, la gran referencia del Rivas en esta fase final con un promedio de más de 22 puntos por partido, a los que añade 12 rebotes de media.
Su compatriota Essence Carson, Anna Cruz, especialista en situaciones de tensión, y Elisa Aguilar, timón del equipo, forman junto a ella la columna vertebral del equipo.
Las referencias del Ros, dada la constelación de estrellas que tiene en su plantilla son más numerosas y por eso más repartidas, aunque destaca el liderazgo que sobre el grupo ejerce Laia Palau, la constancia de Ann Wauters y Sancho Lyttle, la frescura de jugadoras como Maya Moore, Silvia Domínguez, Esahhaya Murphy e Isabelle Yacoubou y el evidente paso adelante que ha dado en esta cita Laureen Jackson.
Más allá de cuestiones estadísticas, el encuentro, como todos los últimos enfrentamientos entre ambos equipos incluye algunos factores sentimentales a tener en cuenta.
Por un lado, el que protagonizan Elisa Aguilar y Amaya Valdemoro, dos referencias históricas en el Ciudad Ros Casares, que ahora militan en el Rivas y ya le arrebataron un título a su antiguo equipo, y por otro, Vega Gimeno, la joven ala-pívot del Rivas, nacida en Valencia pero que nunca ha militado en el Ros.
Pase lo que pase en el encuentro de mañana, el equipo perdedor tendrá una oportunidad para tomarse la revancha en cuestión de días y es que ambos equipos se enfrentarán en las semifinales de la Liga Femenina, una eliminatoria al mejor de tres encuentros que empezará en Valencia el próximo sábado y que disputará su segundo encuentro el miércoles 11 de abril en el Cerro del Telégrafo.