El Barcelona Lassa rompió la racha de cuatro títulos consecutivos del Real Madrid superando al conjunto blanco en la final de la Copa del Rey por 92-90, merced a un emergente Pau Ribas (21 puntos y 24 de valoración) y a la consistencia del francés Thomas Heurtel -MVP del partido-, conjugado con un gran despliegue defensivo que desactivó por momentos el juego del hasta hoy vigente campeón.