Quique Sánchez Flores, entrenador del Atlético de Madrid, admitió que se equivocó "claramente" contra el Barcelona, en el que su equipo jugó con "un elemento menos", en referencia a la alineación como titular del argentino Sergio Agüero, con una contusión en la pierna izquierda.
Ese partido significó la primera derrota de Liga del equipo rojiblanco. "Nos gustaría ganar siempre, pero a veces no sucede porque sabes que todos los fines de semana hay un saco de equipos que pierde, otro que gana y otro que empatan. Tienes que pertenecer a todos los sacos durante todo el año. Es imposible no hacerlo. Entonces, hay que ir con naturalidad y sentido común", dijo.
"Le digo a la afición, que sé que es extraordinaria, que mantenga la ilusión porque ya lo vio, que en la mejor versión del Barcelona, del mejor equipo del mundo y nosotros jugando con un elemento menos, porque me equivoqué claramente, fuimos capaces de llevar el partido a una situación donde, hasta el último momento, el Barcelona tuvo que hacer cambios defensivos porque, aún siendo superiores, el Atlético da una sensación muy importante. Y nosotros no vamos a dejar de dar esa sensación en ningún momento", aseguró.
Este jueves será su siguiente prueba, en Mestalla ante el Valencia. "El partido es muy complicado. Lo sabemos, pero entra dentro de este calendario feroz que tenemos. Pocos equipos lo tienen como el nuestro a nivel de la prontitud con la que recogemos a todos los equipos que van a aspirar a lo mejor: la Liga", recordó.
FRENTE AL VALENCIA NOS TENDREMOS QUE VOLVER A PONER EL MONO DE TRABAJO
"Ahora vamos a Mestalla con un rival que juega bien, que es líder y que tiene la moral de los líderes, pero nosotros, de nueve puntos, con un calendario difícil, tenemos seis y un balance de goles a favor y en contra muy positivo. Las sensaciones de nuestro equipo son buenas y nos tendremos que volver a poner el mono de faena desde el primer minuto para hacer un buen resultado", añadió.
A pesar de la baja de Agüero, fuera de la convocatoria por una contusión en la pierna izquierda que arrastra desde el encuentro de hace dos jornadas frente al Athletic, Quique advirtió de que no quiere echar al equipo "atrás" en la visita a Mestalla. "No queremos tener esa sensación de que apostamos a menos. Salga quien salga, la apuesta será llegar a portería más que el rival", advirtió.
"El Valencia tiene unos jugadores de interior buenos, las bandas buenas, una capacidad ofensiva importante y su campo sigue siendo muy difícil. Pero nosotros no hemos cambiado el rol, seguimos en el rol de antes de perder con el Barcelona y después de lo que pueda suceder en los siguientes partidos. Nuestro rol es estar entre los cuatro primeros y hacia eso vamos", recalcó.
Quique, que valoró que el Valencia, respecto al pasada curso, es un equipo "más a la medida del entrenador" y ha ganado "más en la forma de llegar al área, porque tienen otro tipo de futbolistas, que no sólo entran por dentro con Mata y con Joaquín, sino que también lo hacen por arriba con Aduriz y Soldado", reconoció que para él siempre es "especial" visitar ese estadio.
"He vivido veinte años de mi vida en Valencia. Tengo amigos, una afición que me aplaudió mucho como futbolista y que durante un tiempo me respetó mucho como entrenador. Parte de lo que hoy soy como entrenador se lo debo al Valencia por los conocimientos que adquirí como futbolista y entrenador", repasó.
En el encuentro del jueves, además, habrá un interesante duelo en las porterías entre la experiencia de César Sánchez, en el Valencia, y la juventud de David de Gea, en el Atlético. "Es una bendición para el Valencia tener un portero experto de ese nivel y para nosotros tener un portero del talento de David", explicó Quique. "Pero con David hay que tener un margen, porque es su segundo año y es mas difícil el año de la confirmación. Lo que pasa es que le va a ayudar que tiene una cabeza prodigiosa, pero tenemos que tener calma. Él, afortunadamente, es un hombre que los elogios los filtra bastante bien y sabe hacer con eso lo que tiene que hacer", aseguró.
