La UCI precisó que la Federación Española será la encargada de llevar a cabo esta instrucción, y decidirá eventualmente si se sanciona al ciclista, lo que conllevaría la pérdida de su victoria en el pasado Tour, según el artículo 288 del reglamento antidopaje.
Los resultados anormales de dicho control, realizado el pasado 21 de julio, en el que Contador dio positivo por Clembuterol, fueron revelados a finales de este mes de septiembre. Contador atribuyó ese positivo a una intoxicación alimentaria.
Según precisó la UCI el mes citado, los restos de ese producto prohibido por el reglamento antidopaje detectados en la orina de Contador eran infinitesimales. La prueba tuvo lugar en la segunda jornada de descanso del Tour de Francia, a su paso por Pau, al sur del país.
El triple ganador del Tour de Francia, en 2007, 2009 y 2010 fue suspendido de forma temporal por la UCI el pasado 30 de septiembre. El pasado 19 de octubre, el presidente de la UCI, Pat McQuaid, justificó en su día que no se hubiese sancionado directamente a Contador dada la ínfima cantidad de clembuterol hallada, dato que, dijo, "complica los estudios". "Sabemos que el clembuterol es positivo aunque sea poco, pero queremos saber cómo esa pequeña cantidad llegó ahí. El ciclista dice que fue por una contaminación alimentaria, es una posibilidad, pero tenemos que estudiar si es buena", señaló entonces.
Días antes, Contador que siempre aseguró que no se dopó, comentó en un canal de televisión que se sentía en una situación de impotencia tremenda, además de encontrarse triste y preocupado constantemente. Según el ciclista, el pequeño índice de clembuterol encontrado fue debido a una ingesta de un solomillo de ternera que le llevó un amigo.
Recordó que a diferencia de otros casos, en el suyo, los dos días anteriores pasó los mismos controles, primero de orina y luego de sangre, que el resto y no se halló nada. Sin embargo, el 21 de julio se detectó el clembuterol, que poco a poco luego disminuyó hasta desaparecer, explicó.
Algunos medios franceses aseguraron que se encontraron restos de plástico en su sangre, lo que en opinión de los mismos apuntaría a una autotransfusión. A modo de respuesta, Contador, que se declaró en múltiples ocasiones acérrimo luchador contra el dopaje, recordó que lleva consigo a lo largo de todo el año un pasaporte biológico y autorizó que se analicen todas las veces que se considere oportuno sus pruebas congeladas.
Según el ciclista, la carne de ternera que ingirió antes de la prueba que dio positivo había sido comprada en España.