El púgil filipino Manny Pacquiao volvió a dar otra cátedra de boxeo para imponerse por decisión unánime al mexicano Antonio Margarito y conseguir el octavo título mundial de su carrera profesional. El campeón filipino logró la corona del peso superwelter, versión Consejo Mundial de Boxeo (CMB), que estaba vacante, en la primera pelea que realiza en esa categoría después de haber ganado en todas las categorías desde el mosca.
Pacquiao, de 31 años, dominó de principio a fin la pelea programada a 12 asaltos y sólo en el noveno comenzó a sentir cansancio, pero su clase y combinación de golpes no le permitieron a Margarito hacerle daño. El nuevo campeón del mundo, que se llevó una bolsa de 15 millones de dólares garantizados y que puede incrementar a 25 por los derechos de televisión, la mejor de su carrera, no dio nunca opción a Margarito a que impusiese su mayor envergadura y el gran éxito del púgil mexicano fue terminar de pie la pelea.
Los jueces de la pelea disputada en el Cowboys Stadium, de Arlington (Texas), registró una entrada de 41.734 espectadores, muy por debajo de lo que se esperaba, entre 50.000 y 60.000, no tuvieron ninguna duda a la hora de valorar la pelea y todos fueron unánimes en la puntuación (120-108, 119-109 y 118-119).