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El vigente campeón de la Euroliga, el Real Madrid, necesita ganar imperiosamente al Fenerbahce turco de Zeljko Obradovic para seguir vivo en la competición y alejarse, un poco, del precipicio de la eliminación a las primeras de cambio.

Con sólo dos victorias en siete partidos, el Real Madrid se ha labrado un futuro con muchos nubarrones en la máxima competición europea, que se ensombrece aún más tras la baja de Rudy Fernández y la casi segura ausencia de Trey Thompins. Por una vez, el Madrid no quiere romper récords y convertirse en el primer ganador de la competición que es eliminado en la primera ronda en la siguiente temporada.

SITUACIÓN COMPROMETIDA

La situación de los de Pablo Laso es muy complicada, aunque no desesperada. El partido ante el Fenerbahce es importante, pero no vital. Aún perdiendo, el Real Madrid seguiría teniendo opciones de clasificación; pero una victoria, aunque no solventaría los problemas sí le daría un empujón en la clasificación y hacia el 'Top 16', con un mejor punto de partida para las dos últimas jornadas trascendentales.

El Fenerbahce ganó en la primera vuelta al Madrid por 77-66 y ya tiene el pasaporte para la siguiente fase en el bolsillo, aspecto importante de cara a la mentalización con la que saldrán unos y otros al parqué madrileño. Esta circunstancia permite, además, que los blancos no tengan que luchar también por la diferencia de puntos y que la victoria sea su único objetivo.

La baja de Rudy, importantísima desde cualquier prisma, debe ser la tilde que permita a la plantilla concentrarse en ganar un partido fundamental para sus intereses y que debe ser el inicio de una remontada que cambie completamente su forma de afrontar la temporada.

La falta de descanso, de entrenamientos y el acoplamiento del equipo deben pasar a un segundo plano y el único foco debe dirigirse a ganar el siguiente partido. En las dos últimas jornadas, ante el Bayern, en Múnich, y el Estrasburgo, el Madrid se la jugará pero para llegar con más opciones y con más moral la victoria ante el Fenerbahce es ineludible.