Un Maccabi en crisis y enrabietado espera al Madrid para rehabilitarse

  • La victoria en Tel Aviv daría al Madrid la ventaja de campo en el 'playoff'
  • Pablo Laso: "Buscamos asegurar una de las dos primeras plazas"
Real Madrid ante el Maccabi Tel Aviv
Real Madrid ante el Maccabi Tel Aviv |Telemadrid

Herido en el orgullo, el Maccabi de Tel Aviv encara el partido de este jueves contra el Real Madrid como la oportunidad perfecta para lograr una victoria balsámica, apurar sus opciones de ser segundo y rehabilitarse frente a la afición tras el monumental descalabro sufrido el pasado domingo en la liga nacional.

Tras un inicio fulgurante, con récord de victorias seguidas y un liderazgo efímero, incluso, del grupo europeo, los macabeos han entrado en las últimas semanas en una dinámica negativa que ha desatado dudas. Y que en caso de nueva derrota esta noche, le obligue a tener que preocuparse de los que vienen detrás y a olvidar el sueño de desbancar a los de le preceden arriba, en particular en esta Euroliga.

A GARANTIZARSE EL FACTOR CANCHA EN EL CRUCE

Primero, con la agónica derrota (72-70) el pasado jueves en campo del Partizan, que ahogó parte de sus esperanzas de auparse a los dos primeros puestos y garantizarse el factor cancha en el cruce, que esta noche buscará con ahínco en el Nokia Arena el equipo de Pablo Laso.

Y después, con una histórica paliza en el campeonato doméstico frente al Hapoel Jerusalén (65-93), una de las derrotas más amplia y dolorosa jamás sufridas por el equipo de Tel Aviv en su propio pabellón.

Unas dudas que el calendario europeo incrementan, ya que, además de el Real Madrid, al Maccabi le resta visitar la cancha del Bayern de Munich (solo dos victorias por debajo) y recibir en la última jornada al CSKA con la primera plaza del grupo en juego, probablemente, para los moscovitas.

GALATASARAY, AL ACECHO

Y aunque el Galatasaray también debe recibir al equipo ruso, si gana al Zalgiris y el Maccabi no supera al Madrid, los israelíes sentirán el aliento de los turcos y la amenaza de quedar relegados al cuarto puesto, que les obligaría al complicado cruce, posiblemente con el Barcelona.

"Encaramos este partido con toda la voluntad de ganar", explicó tras el últimos entrenamiento David Blatt, quien admitió la superioridad del equipo español y su cartel de favorito para la batalla de esta noche.

"Todo el mundo conoce su fuerza y la temporada increíble que está llevando a cabo este año. En el primer encuentro libramos una lucha excepcional que se resolvió en el último minuto", continuó.

"Pero esperamos poder llevarlos a un tipo de juego en el que seamos capaces de sorprenderles. En este tipo de partidos somos una especie de perdedor esperado, como lo son todos los que se enfrentan al Madrid, pero con nuestras opciones", agregó.

Al hilo de este argumento, Blatt insistió en que pese a los varapalos recientes ve al equipo "entrenando de forma excelente, muy centrado, convencido plenamente de volver a ser los mismos, de volver al juego" del inicio de la temporada que le llevó a encadenar 17 victorias en todas la competiciones.

BLATT: "AL REAL MADRID LE GUSTA JUGAR A UN RITMO MUY ELEVADO"

Una racha que vio cercenada en su visita al Palacio de los Deportes de Madrid, en el que se presentó dentro de una dinámica totalmente opuesta: Entonces era líder del grupo y días antes se había aupado a la cabeza de la clasificación de la liga israelí con un buen juego de perímetro.

La ansiada victoria pasa esta noche, según Blatt, por desnaturalizar el juego del Madrid y anular ese despliegue vertiginoso de sus hombres pequeños que ha convertido a los de Laso esta temporada en casi invencibles.

"El Real Madrid es el primer equipo al que le gusta jugar a un ritmo muy elevado. Avanzan porque tienen jugadores que llevan jugando juntos durante mucho tiempo. La clave del éxito es sacarlos de su juego natural", detalló sobre un partido que ya es un clásico europeo.

Maccabi y Real Madrid se han enfrentado en 48 ocasiones en la Copa de Europa, con un balance de victorias (28-20) favorables para el equipo español, en el que es el emparejamiento más repetido de esta competición.

Siempre rocoso, siempre combustible, expertos israelíes creen que en esta ocasión la clave para tumbar "a la "bestia negra" reside en si los hombres del perímetro macabeo -Ricky Hickman, Guy Pnina, Alex Tyus y Yohev Ohayon- logran frenar a Sergio Llul, Sergio Rodríguez y Rudy Fernández, y desactivar su conexión con Felipe Reyes y Nikola Mirotic.

Y en la capacidad anotadora del norteamericano Devin Smith -tieso en el partido con el Hapoel, con sólo 4 puntos y seis de valoración- y la solidez del gigante griego Sofoklis Schortsanitis para imponer sus centímetros en la pintura.