Lewis Hamilton (Mercedes), doble campeón del mundo de Fórmula Uno -en 2008 (con McLaren) y el año pasado-, dispondrá este fin de semana, en el Gran Premio de Estados Unidos, en Austin (Texas), de su primera oportunidad para capturar su tercer título mundial en la categoría reina del automovilismo.
Hamilton, de 30 años, logró, al ganar hace dos domingos el Gran Premio de Rusia, en el circuito urbano del anillo olímpico de Sochi -sede de los pasados Juegos de Invierno-, su novena victoria de una temporada que podría dejar matemáticamente resuelta a su favor en Austin este fin de semana.
SUPERA EN 66 PUNTOS A VETTEL
Un triunfo que fue el cuadragésimo segundo desde que pilota en Fórmula Uno, con lo que igualó la tercera marca histórica que detentaba, desde el último Gran Premio de Hungría, el cuádruple campeón mundial alemán Sebastian Vettel (Ferrari), al que supera en 66 puntos a falta de las últimas cuatro carreras, en las que el inglés debería repetir cuatro sonoras pifias para que se le escapase una nueva corona.
Lewis lidera con 302 puntos, con los citados 66 sobre Vettel -que encabezó el cuatrienio glorioso de Red Bull entre 2010 y 2013- y con 73 respecto a otro alemán, su compañero y rival Nico Rosberg, que, tras salir desde la 'pole', perdió toda opción al romper el acelerador en las primeras vueltas de la carrera de Sochi, en la que cedió el segundo puesto en el Mundial a su compatriota de Ferrari.
Hamilton se proclamaría campeón del mundo este domingo si suma nueve puntos más que Vettel y tres más que Nico; o, simplemente, con que encabezase el noveno 'doblete' del año de Mercedes, que en Rusia también se aseguró de forma matemática la revalidación del título de constructores que festejó el año pasado.
'BOLA DE PARTIDO'
El excéntrico y espectacular piloto de Stevenage dispondrá de su primera bola de partido en el Circuito de Las Américas, una pista ondulada, de 5.513 metros y veinte curvas, a la que este domingo está previsto que se den 56 vueltas, en sentido inverso al de las agujas del reloj, para completar un recorrido de 308,4 kilómetros.
La pista se estrenó en 2012, año en el que se reintegró en el calendario del Mundial de F1 el Gran Premio de Estados Unidos, que se había disputado con anterioridad por última vez en 2007, en Indianápolis.
Se resolvió con victoria, en el año de su debut en F1, del británico, último ganador en la mítica Motor Speedway y primero en la nueva pista de Texas, donde también se impuso el año pasado, por delante de Rosberg (resultado que, de repetirse, le daría el título); y donde hace dos ganó Vettel, segundo en Sochi. Donde brilló el mexicano Sergio Pérez, que logró un sobresaliente tercer puesto que supuso su quinto podio desde que compite en F1 y que le sitúa noveno en el Mundial, con 54 puntos.
'Checo', de 25 años, que había subido tres veces al cajón en 2012, cuando pilotaba para Sauber, logró en Rusia su segundo podio desde que lo hace para Force India, después del obtenido el año pasado en Bahrein.
El bravo piloto tapatío será una de las principales atracciones este fin de semana en el Circuito de las Américas, al que suelen acudir numerosos mexicanos; y más aún al siguiente, cuando la F1 regrese al DF, sede del Gran Premio de México, antepenúltimo del certamen, que se cerrará en Abu Dhabi tras pasar por Brasil.
SAINZ BUSCA PUNTOS
Carlos Sainz (Toro Rosso) compartió protagonismo en Sochi, donde su compatriota Fernando Alonso (McLaren) festejó su Gran Premio número 250 en la categoría reina. Poco más pudo celebrar el doble campeón mundial asturiano, que acabó décimo a orillas del Mar Negro, pero que, por salirse de los límites de la pista, fue sancionado con cinco segundos que le costaron un puesto en la clasificación y el punto que hubiese sumado sin penalización.
El talentoso piloto madrileño, hijo del doble campeón mundial de rallys de mismo nombre, provocó el susto del Gran Premio al accidentarse aparatosamente, pero sin gravedad, el sábado.
Hasta solo un par de horas antes de la prueba, Carlos no recibió el visto bueno para correr. Y cuando estaba firmando la remontada del día -salió vigésimo y circulaba séptimo- una avería relacionada con los frenos lo obligó a abandonar. No sin el reconocimiento a su destreza y arrojo por parte de toda la parrilla.
Sainz buscará puntos en un Gran Premio -en el que, si es en seco, se rodará con neumáticos blandos y medios- para el que Alonso no prevé excesivos avances, en la peor temporada de toda la historia de McLaren, en su reencuentro con el motorista japonés Honda.
El venezolano Pastor Maldonado (Lotus), séptimo en Rusia, intentará olvidar de forma definitiva las malas rachas anteriores y puntuar, por tercera vez seguida este año, en Texas. Donde, después de haberlo hecho de nuevo en Rusia, no estará el tercer español en el Mundial, el castellonense Roberto Merhi, que cederá otra vez el Manor al estadounidense Alexander Rossi y que volverá a pilotar en la última carrera del curso, el último fin de semana de noviembre, en el circuito de Yas Marina de Abu Dhabi.