El capitán del Real Madrid Felipe Reyes, recién convertido en máximo reboteador histórico de la Euroliga, ha asegurado que "nunca" soñó con "batir un récord" de la máxima competición europea, algo que ha logrado "gracias a las ganas y la colocación" que exhibe en cada pelea por los balones rechazados.
"Nunca soñé con llegar a conseguir cosas tan importantes como esta. Cuando era pequeño solo quería divertirme, hacerlo lo mejor posible, pero en ningún momento soñé con llegar a batir un récord histórico en la Euroliga, una competición tan importante", reconoció Reyes en declaraciones a la web de la Euroliga .
"ESTOY MUY ORGULLOSO"
El pívot resaltó que para él "tiene mucha importancia" este logro. "Ser el mejor de la historia de una competición tan fuerte, sobre todo en el rebote, una faceta del juego que siempre me ha caracterizado y que desde pequeño he trabajado muchísimo. Estoy muy orgulloso y ahora intentaré seguir aumentando esa diferencia para que no me pille el siguiente", se animó.
El cordobés logró la plusmarca la semana pasada en la cancha del Maccabi Electra Tel Aviv, donde superó el registro de "un especialista" del rebote como Mirsad Turkcan, estableciendo el nuevo récord en 1.288 capturas. "Hay que tener un poco de todo. Sobre todo, el instinto de saber colocarte, de saber dónde va a ir el rebote, de ganar la posición, las ganas... Eso es lo más importante. Luego el físico también es importante, pero yo no soy un pívot muy alto y he conseguido batir el récord gracias a las ganas y la colocación", analizó.
Por último, Reyes tuvo un recuerdo para los entrenadores que le han ayudado desde que fichó por el club blanco. "Desde que llegué al Real Madrid no he parado de crecer porque he tenido entrenadores que me han ayudado mucho a trabajar en cada entrenamiento y mejorar mi tiro. Si no llega a ser por ellos, a lo mejor no podría haber mejorado ni conseguido todo esto", valoró.
