La selección española tiene este sábado (20:30) una cita con la historia en el mítico estadio Ellis Park, donde se enfrentará a Paraguay con el anhelo de acabar con el maleficio de los cuartos en los Mundiales, meterse en las semifinales y como mínimo igualar su mejor clasificación histórica.
La campeona de Europa ha revertido su situación tras la derrota inicial ante Suiza y se ha revalorizado con las victorias ante Honduras y Chile, en los otros dos encuentros de la primera fase, y sobre todo en octavos contra la Portugal de Cristiano Ronaldo.
El conjunto de Vicente del Bosque va de más a menos y los elogios no se han hecho esperar. Vuelve a ser cabeza de cartel y su favoritismo para el choque ante los guaranís es patente, aunque, obviamente, nada decisivo.
Y es que el encuentro no es menos importante para Paraguay, que nunca había conseguido alcanzar los cuartos de final y mantiene vivo también su sueño de gloria.
España tiene como mejor referencia mundialista el cuarto puesto en Brasil'50, pero en aquella ocasión lo que se disputó fue una liguilla. Desde entonces y con anterioridad, los cuartos de final han sido un muro infranqueable.
La última ocasión fue en Corea y Japón 2002, cuando el equipo que dirigía José Antonio Camacho cayó en la tanda de penaltis ante los anfitriones surcoreanos en un partido que pasó a la lista negra por la decisiva actuación en contra del equipo arbitral que encabezaba el egipcio Gamal el Ghandour. Italia, en 1934 y 1994, y Bélgica, en 1986, truncaron también el sueño español en esta ronda.