Eslovaquia y España se juegan el liderato del Grupo C, tras ganar en la primera jornada camino de la Eurocopa 2016, con máximo respeto de la Roja a una selección que sorprendió a Ucrania y con la sospecha de encerrona en la pequeña localidad de Zilina en un estadio para tan solo 11.000 espectadores.