El Manchester United ha anunciado que el inglés David Moyes, entrenador del Everton hasta final de temporada, sucederá al escocés Alex Ferguson en el banquillo de Old Trafford a partir de la próxima campaña.
Moyes, de 50 años, firmará un contrato de seis temporadas para relevar de Ferguson, de 71, que este miércoles anunció su retirada después de 26 años como técnico de los "diablos rojos".
El presidente del Everton expresó "en nombre de todo el equipo" su "agradecimiento hacia David por la increíble contribución que ha hecho en el Everton desde que llegó".
"Ha resultado un entrenador fuera de lo común. Durante su estancia en el Goodison Park, David ha dirigido al equipo en más de 500 ocasiones, incluidas cuatro campañas europeas", apuntó Kenwright.
El club recordó que Moyes estará al frente del equipo todavía dos encuentros más, los que restan para concluir la liga esta temporada, ante el West Ham y el Chelsea.
La directiva del club avanzó "comenzará inmediatamente a busca un sucesor de Moyes en el banquillo".
ROONEY QUIERE DEJAR EL MANCHESTER
El delantero del Manchester United Wayne Rooney quiere seguir el ejemplo de Alex Ferguson y ha pedido marcharse del club a final de temporada para "buscar un nuevo comienzo", pero el club asegura que "no está en venta".
El jugador inglés, de 27 años, habría mantenido hace dos semanas una "conversación informal" con Ferguson en la que "sugirió" que sería mejor para él probar suerte lejos de Old Trafford, pese a que aún le atan dos años de contrato con el United, informa la prensa británica.
El club emitió un comunicado ante las informaciones sobre la posible marcha del jugador en el que declara que Rooney "no está en venta" y la prensa británica apunta que sería necesario contar con la opinión del futuro entrenador.
Pese a que aún no se ha anunciado oficialmente el nombre del sustituto de Ferguson, los medios dan por segura la elección de David Moyes, de 50 años y actualmente en el banquillo del Everton.
Rooney ya estuvo a las órdenes de Moyes en el Everton durante dos temporadas hasta 2004, cuando a los 18 años se convirtió en un "diablo rojo" por un traspaso que puso fin a una relación complicada con su entrenador, según la prensa británica.
Los rumores sobre el descontento del jugador en el United comenzaron durante la segunda mitad de la temporada, después de que fuera apartado del terreno de juego en favor de Danny Welbeck durante la vuelta de Champions contra el Real Madrid.
Ferguson salió entonces en defensa del delantero y dio su palabra de que la permanencia en el United estaba asegurada para la próxima temporada y que su situación se renegociaría, ya que a falta de dos años para finalizar un contrato los clubes suelen tantear a los jugadores.