El ciclista español Alberto Contador (Saxo Bank-Sungard) afrontará desde este sábado su primer, y quizás único, gran reto de la temporada 2011 cuando busque adjudicarse su segunda victoria en el Giro de Italia, del 7 al 29 de mayo, una primera 'grande' que se presenta espectacular y donde el pinteño liderará una participación donde faltan sus grandes rivales.
A la espera de lo que pueda decidir el Tribunal de Arbitraje Deportivo, que dictará sentencia sobre los recursos de la UCI y la AMA contra su absolución por parte de la RFEC de su resultado adverso por clembuterol en el pasado Tour de Francia y que le permitirá o no estar en la ronda francesa, el corredor madrileño acude a una carrera en la que también se 'refugió' en 2008, cuando ASO vetó a su equipo, el Astana, por sus escándalos de dopaje.
En aquella ocasión, Contador llegó a última hora, cuando estaba de vacaciones y en su calendario no aparecía ni rastro de la 'corsa rosa'. Sin embargo, fue el mejor y apenas dio opciones a sus rivales, conquistando su segunda gran vuelta de tres semanas, éxito al que posteriormente uniría la Vuelta para tener el trío de ases en su bolsillo gracias a su triunfo en el Tour de 2007.
Ahora, para el ciclista español, el Giro es también una reválida y una revancha deportiva por todo lo que ha sucedido en los últimos nueve meses. Además, si el TAS da la razón a UCI y AMA, dirá adiós a su posibilidad de buscar el 'triplete' en la 'Grande Boucle'. Igualmente, al contrario que hace tres años, la carrera transalpina sí estaba en sus planes iniciales y su preparación ha ido encaminado hacia ella.
De momento, Contador ha brillado allí por donde ha ido. Empezó quedándose cerca de la victoria en el Algarve, y posteriormente se hizo con la Vuelta a Murcia y con la Volta, esta última ya dentro del calendario mundial. En Castilla y León, una avería le apartó de la victoria y en su última aparición, en la Flecha Valona, no pudo pelear por el triunfo como en 2010, pero estuvo con los mejores en el 'muro' de Huy.
Sin embargo, todas estas pruebas quedan reducidas por la majestuosidad de un Giro, que nuevamente vuelve a presentarse atractivo y capaz de sacarle todo el partido a su magnífica orografía, que le permite acudir a sitios variados, y en este 2011, de particular dureza.
La ronda se ajusta al perfil de escalador del de Pinto. Hay muchísima montaña, sobre todo en un final temible donde de las nueve etapas, seis son de alta montaña, hay una cronoescalada, una de media montaña y la contrarreloj final de Milan de 30 kilómetros.
Las cumbres y las ocho llegadas en alto han asombrado al triple campeón del Tour, sobre todo el Monte Crostis, el coloso cuyo descenso atemoriza a todos, e incrustado en una decimocuarta etapa con final en el Monte Zoncolan. Un día antes acabarán en Grossglockner y uno después en Val di Gardeccia, con cinco puertos y la 'cima Coppi', el Passo Giau, y un total de 6.500 metros de desnivel. Tras el descanso, la cronoescalada de Nevegal, tres etapas más de alta montaña, dos con final en alto, entre ellos Sestriere, y el final de Milan, que puede ser trámite o decisivo.
LOS RIVALES
En cuanto a los rivales, Contador no tendrá la oposición de los principales de los últimos años ya que ni Andy Schleck, ni Cadel Evans o Robert Gesink, que prefieren centrarse en el Tour, estarán en suelo italiano. Por ello, las principales amenazas van a venir por parte de la 'Armada' italiana, que querrá defender la victoria de Ivan Basso del año pasado.
El varesino se dio de baja a última hora de una carrera en la que no iba a ser el jefe de filas del Liquigas-Cannondale, papel que recae en Vincenzo Nibali, probablemente la mayor preocupación de Contador. El campeón de la Vuelta a España fue tercero en 2010 y no pudo desplegar todo su potencial por respeto a Basso, y ahora ha preparado con mimo este Giro para sumar su segunda 'grande'. Buen escalador y capaz de manejarse con soltura en la contrarreloj, el 'Tiburón' quiere medir su progreso y su apuesta para el futuro.
También habrá que tener en cuenta al veterano ruso Denis Menchov (Geox-TMC), ganador de la 'maglia rosa' en 2009 y podio en la pasada 'Grande Boucle', que también podría contar con la ayuda del veterano Carlos Sastre, que afronta su sexto Giro, en el que quedó segundo en 2009. Algo más retrasado en las apuestas está el italiano Michele Scarponi (Lampre-ISD), sobre todo porque flojea más en la contrarreloj o el joven checo Roman Kreuziger.
De todos modos, Contador no será la única baza nacional para brillar en la carrera. David Arroyo (Movistar Team) defiende su gran podio, segundo, de la última edición e intentará a estar a un nivel parecido, mientras que tampoco hay que olvidar a Joaquím Rodríguez (Katusha) ni a Igor Antón (Euskaltel-Euskadi), que han demostrado su calidad tanto en el Tour como en la Vuelta, respectivamente.