El técnico Manolo Cadenas se encuentra cada día más cómodo al frente del equipo español, más cómodo como el mismo reconoce al mando de una selección para la que sólo ve un objetivo posible en el Mundial de Catar, tratar de revalidar el oro conquistado hace dos años en Barcelona.
Un titánico reto para el cual el seleccionador español confía, como señaló en una entrevista concedida a la Agencia EFE, en la madurez de un equipo que, pese a la presencia de estrellas como Julen Aginagalde o Joan Cañellas, volverá a tener su mayor virtud en el carácter coral de su juego.
¿Cómo llega la selección a este Mundial?
En algún aspecto mejor que al Europeo del pasado año en Dinamarca, porque hemos tenido unas concentraciones más equilibradas, en las que hemos tenido tiempo para mejorar el apartado físico y en ese sentido llegamos en un buen momento como se ha confirmado en el torneo de Oviedo
Y usted, tras su primera experiencia internacional el pasado año en el Europeo de Dinamarca. ¿Lo afronta de un modo distinto?
El otro día Antonio García -lateral de la selección- me decía, te veo más motivado, y no es exactamente así. Estoy igual de motivado, pero este año estoy más integrado, diría yo, y eso hace que me muestre con más entusiasmo, con más participación.
El año pasado era mi primera cita con la selección, un equipo campeón del mundo y siempre se entra con respeto, este año estoy más integrado, más cómodo en mi papel.
Durante la fase de preparación el equipo ha trabajado en defensa tanto en 6-0 como en 5-1. ¿Qué sistema le ha dejado más satisfecho?
El 5-1, sobre todo, porque hay veces que nos ha faltado la confianza en este sistema y necesitábamos buenos resultados, buenas acciones defensivas para reforzar la confianza en esa disposición y en el torneo de Oviedo eso se ha logrado, lo que nos tiene que dar la confianza para saber que cuando no funcione el 6-0 podemos solucionarlo con el 5-1.
En ataque se ha visto al equipo muy fluido, haciendo llegar el balón a los extremos y al pivote. ¿En qué debe mejorar el ataque español?
Incluso dentro de esa fluidez debemos ser todavía más dinámicos. No basta solamente con saber exactamente donde debemos atacar y a quien debemos fijar para crear situaciones de gol, el movimiento de balón debe ser más rápido, falta a veces un poco más de fluidez en la circulación, aunque en líneas generales estoy muy contento. Falta, que duda cabe, un poquito de lanzamiento, pero el equipo tiene muchas variantes.
Con respecto al Europeo de Dimamarca destacan las novedades de Chema Rodríguez y Alex Dujshebaev. ¿Qué aporta al equipo un jugador como Chema Rodríguez?
Chema fue un jugador decisivo en el Mundial que se ganó en 2005, que un jugador inexperto, como era entonces Chema, marque la pauta, como hizo él en Túnez, es algo muy difícil de ver y hoy todavía a sus 35 años, creo que es un jugador que tiene muchas cosas que aportar, las acciones decisivas en el uno contra uno, el juego con el pivote, la velocidad en el contraataque. Es un jugador que nos va a venir muy bien.
Y Alex Dujshebaev. ¿Qué se puede esperar de él?
Es capaz de jugar ese balonmano colectivo al que está acostumbrado la selección y además genera peligro, porque tiene lanzamiento, tiene gol y, sobre todo, tiene esa frescura de todo jugador joven.
España destaca por su carácter colectivo, pero es indudable el cada vez mayor peso que tiene Joan Cañellas en el juego de la selección. ¿Qué supone la presencia de un jugador como Cañellas para el equipo?
Si decimos que Sterbik es el mejor portero del mundo y que Julen -Aginagalde- es el mejor pivote, que duda cabe de que Cañellas está entre los mejores del mundo en esa posición de central-lateral. Con el Kiel ha dado otro paso adelante en su carrera deportiva y desde luego es una seguridad saber que de Cañellas va a salir mucho balonmano.
¿Cuál es el objetivo en este Mundial?
Cualquier equipo, no sólo España que es la vigente campeona mundial, quiere mejorar lo que se ha hecho anteriormente.
Entonces digamos que el objetivo es el oro.
Por supuesto