La expedición del Barcelona se encuentra ya en Pamplona tras llegar en autobús desde Vitoria, donde se ha visto obligado a aterrizar como consecuencia de la niebla que ha cancelado los vuelos en el aeropuerto de Noain-Pamplona.
El club azulgrana, que juega este jueves en el estadio Reyno de Navarra el partido de vuelta de los octavos de final contra Osasuna, tenía previsto llegar a la capital navarra con un vuelo directo desde Barcelona, viajando en el día del encuentro como acostumbra los últimos años.
Sin embargo, el equipo barcelonés ha tenido que modificar su plan de viaje por la niebla en el aeropuerto de Noain y tras volar a Vitoria ha completado el trayecto hasta Pamplona por carretera.
La llegada del Barcelona ha levantado mucha expectación mediática, así como de aficionados azulgranas, si bien las medidas de seguridad en los aledaños del hotel de concentración han impedido el acercamiento a los jugadores de Pep Guardiola.
El Barcelona también tuvo que cambiar su plan de viaje a Pamplona para el encuentro de Liga de la pasada temporada por la huelga de controladores aéreos, lo que obligó a la expedición azulgrana a viajar a contrarreloj hasta Zaragoza en tren y posteriormente por carretera hasta la capital navarra.
Como novedad, el Barcelona pasará noche en Pamplona tras jugar contra Osasuna a las 22.00 horas, ya que el aeropuerto de Noain no está operativo a la hora de finalización del encuentro.
El partido entre Osasuna y el Barcelona está pendiente de la evolución de la niebla en Pamplona. El miércoles, a la hora del encuentro, la niebla era muy densa y podía haber peligrado el encuentro, pero a esta hora podría jugarse sin dificultades.
Curiosamente, el último precedente de un partido con niebla en el estadio Reyno de Navarra es de hace justo tres años contra el Barcelona, el 11 de enero de 2009, cuando el equipo catalán ganó 2-3 con un gol del argentino Lionel Messi en el minuto 85.