Dos goles de Luis Suárez en la segunda mitad permitieron al Barcelona darle la vuelta al partido ante el Atlético de Madrid (2-1), que se había adelantado con un gol de Fernando Torres en el primer tiempo y que vio cómo lo expulsaban en el minuto 35. Fue un gran partido de fútbol, un encuentro de los grandes de la Champions jugado con mucha intensidad y que se decidió por los detalles y por la calidad de los dos nueves.