La Supercopa de España pondrá en juego desde mañana, en el partido de ida en el Vicente Calderón, el primer título de la temporada, por el que el Atlético de Madrid y David Villa desafían al Barcelona, imponente en la primera jornada de Liga y el indudable favorito de esta final a doble encuentro.
El sobresaliente potencial del conjunto azulgrana, vigente campeón de Liga, contra la fiabilidad del equipo rojiblanco en las finales desde la llegada del entrenador argentino Diego Simeone, que ha ganado las tres disputadas en el último año y medio: en la Liga Europa, en la Supercopa de Europa y en la Copa del Rey.
Un duelo exigente para Barcelona y Atlético que comenzará mañana en el estadio Vicente Calderón, que estará prácticamente lleno para el envite, la quinta ocasión que ambos equipos se cruzan en la Supercopa de España. De momento, el balance es favorable al equipo catalán, que ganó a los madrileños en tres de las cuatro anteriores.
Es un encuentro con múltiples atractivos, entre ellos el debut en el Manzanares de David Villa, precisamente contra su ex equipo, del que llegó este mismo verano al club rojiblanco; el duelo del argentino Lionel Messi contra la defensa menos goleada de la pasada Liga o la posibilidad de ver en acción al brasileño Neymar.
Son algunos de los focos de atención de un partido que pondrá a prueba al nuevo Barcelona de Gerardo 'Tata' Martino, que desea empezar mañana mismo a ganar su primer título, lo que pasa por lograr un buen resultado en el Vicente Calderón y rematar la final dentro de una semana en el Camp Nou.
La goleada (7-0) y el excelente juego de los azulgranas en su estreno liguero ante el Levante han dado confianza al equipo de Martino, muy satisfecho por la forma en que sus jugadores han asimilado los nuevos conceptos y han recuperado algunos ya conocidos, como la famosa presión en campo contrario.
El Barça quiere ahora refrendar esas buenas sensaciones en la Supercopa. La pasada temporada al equipo que entonces entrenaba Tito Vilanova se le escapó este título ante el Real Madrid y ahora aspira a reconquistar el primer trofeo oficial de la temporada.
Tal como ya avanzó Martino, que nunca se ha enfrentado a su compatriota Diego Pablo Simeone, pese a haber entrenado ambos en Argentina, las rotaciones van a ser una constante en la gestión de una plantilla con solo 23 efectivos.
El técnico rosarino quiere a todos sus jugadores 'enchufados' y además considera fundamental dosificar esfuerzos en una temporada larga en la que habrá hasta cuatro títulos en juego.
En el encuentro ante el Levante, Jordi Alba, Andrés Iniesta y Neymar da Silva no salieron en el once titular. Los dos primeros lo harán mañana casi con toda seguridad. Por lo que respecta al punta brasileño, el 'Tata' quiere ir incorporándolo a la dinámica del equipo poco a poco, por lo que podría volver a reservarlo de inicio.
Si finalmente Neymar entra en el once, Alexis o Pedro empezarían como suplentes, lo mismo que Adriano Correia y Cesc Fàbregas, seguramente los dos futbolistas damnificados con la entrada de Alba e Iniesta. El resto del equipo probablemente sea el mismo que goleó el pasado domingo en el estreno liguero.
Enfrente estará el Atlético, infalible en sus últimas tres finales, avalado por su sensacional pasada temporada, culminada con la clasificación para la Liga de Campeones y dos títulos, y rearmado este verano con algunos fichajes que unir a una estructura sólida, casi la misma que brilló en el anterior curso.
Villa por el colombiano Radamel Falcao, traspasado al Mónaco. Es el único cambio que ha introducido Simeone en su once tipo: Thibaut Courtois en la portería; Juanfran Torres, Joao Miranda, Diego Godín y Filipe Luis en la defensa; Arda Turan, Gabi Fernández, Mario Suárez y Koke Resurección en el centro del campo; y Diego Costa y el citado atacante asturiano en la delantera.
Ese es el equipo que alineó en Sevilla, en la victoria de la primera jornada de Liga por 1-3, con dos tantos de Diego Costa, y el que planteará mañana contra el Barcelona, al que opondrá sus argumentos del último año y medio: una intensa y agobiante presión, contraataque, verticalidad ofensiva y fortaleza en la retaguardia.
El técnico recupera para mañana al portugués Tiago Mendes, que cumplió sanción por cinco amarillas el pasado domingo en el estadio Sánchez Pizjuán, y dispone de todos sus efectivos con un objetivo en mente: un buen resultado mañana en el Vicente Calderón para la vuelta dentro de una semana en el Camp Nou.