Con o sin entrada, miles de aficionados de Real Madrid y Atlético están o estarán haciendo un desplazamiento histórico que este sábado convertirá Lisboa, capital de Portugal, en una especie de distrito satélite de la ciudad de Madrid, donde se espera la llegada de hasta 70 mil aficionados de ambos clubes.
Aunque es muy difícil precisar el número de aficionados que seguirán en Lisboa la final de la Liga de Campeones, el desplazamiento parte de una cifra masiva: los 34.000 afortunados de ambos clubes que han conseguido entrada –por antigüedad, en el Atlético; por sorteo, en el Real Madrid–, que de ir juntos en autobús llenarían más de 560 de tamaño medio –60 plazas–.
SIN CIFRAS EXACTAS
¿Cuántas personas viajarán? Es "imposible" precisarlo, ha señalado el ministro de Administración Interna portugués, Miguel Macedo, que espera la llegada de entre 40 mil y 70 mil aficionados y ha mostrado su preocupación por la llegada en masa de aficionados en coche particular por la proximidad entre Lisboa y Madrid.
La Dirección General de Tráfico prevé que unos 15 mil vehículos realicen el trayecto entre Madrid y Lisboa, lo que demuestra que ni siquiera el anuncio de responsables municipales de Lisboa de que no habrá pantallas gigantes para seguir el directo el partido más allá de las zonas reservadas para los aficionados ha enfriado la cita.
La cercanía de las ciudades hace que el aeropuerto no vaya a ser en esta ocasión epicentro del "éxodo" por la final, aunque según la agencia de viajes eDreams las ventas de billetes de avión a Lisboa han aumentado un 250% en los últimos días.
Por su parte, Renfe dispondrá de trenes especiales nocturnos –con salida en la noche del viernes– y diurnos en ambos sentidos, con trayecto de vuelta a la finalización del partido –la hora dependerá de la duración del encuentro– y que se suman a la tradicional oferta del Trenhotel Lusitania. Pero será la carretera la principal opción de los aficionados que se desplazan a la capital del Tajo. El grueso de aficionados comenzará a salir a partir de la tarde de mañana, unas 24 horas antes del partido.
La previsión de la Delegación del Gobierno en Extremadura es que más de 400 autobuses circulen por esta comunidad procedentes de Madrid, a los que se sumarán los de otras comunidades y un importante número de coches particulares.
Contar con una entrada no era requisito para conseguir una plaza –están todas vendidas– en uno de los diez autobuses de 54 que han sido fletados por la agrupación de peñas del Atlético –más un avión chárter de 177–, como ocurre en el caso de muchas peñas de ambos clubes que han contratado directamente su autobús.
Muchos grupos de aficionados o amigos han optado por evitar el volante y compartir minibuses o autobuses con chofer para acudir a la final. Es el caso de una peña atlética de Villaverde, que sale en la noche del viernes para "no llegar demasiado pegados al partido" y no hará noche en Lisboa tras el partido.