Fernando Alonso puede lograr su tercer título de Fórmula Uno el domingo en el Gran Premio de Brasil, pero eso es todo lo que se puede decir con certeza cerca del final de una de las temporadas más impredecibles de los últimos tiempos.
Si el piloto de Ferrari gana la penúltima carrera del año y el australiano Mark Webber, de Red Bull, no acaba entre los cinco primeros, el español lo celebrará en Interlagos al igual que en 2005 y 2006, cuando se consagró campeón con Renault.
Alonso, que tiene 11 puntos de ventaja sobre Webber y 21 más que Lewis Hamilton, de McLaren, es el único piloto con posibilidades para ganar el título este fin de semana.
Sin embargo, con cuatro rivales todavía matemáticamente con opciones de ganar el título, nada puede darse por seguro.
"Red Bull sigue siendo favorito (...) tal vez hemos llegado (al final de la temporada) mejor de lo que esperábamos, pero sabemos que la situación puede cambiar", dijo Alonso después de ganar en Corea del Sur hace 10 días.
Alonso sabe que un error o un fallo de motor - un motivo de especial preocupación en Ferrari por los problemas que tuvieron al comienzo de la temporada - puede acabar con su ventaja.
Es muy posible que los cuatro primeros en el campeonato puedan llegar con opciones para la última carrera en Abu Dabi el 14 de noviembre, incluso separados por apenas tres puntos.
Para que eso suceda, Alonso tendría que retirarse en Brasil, Sebastian Vettel ganar la carrera con su Red Bull, Hamilton terminar segundo y Webber quinto.